Rajoy critica que el Gobierno ha sido «incapaz» de hacer un mix energético «razonable y sensato»

El presidente nacional del PP, Mariano Rajoy, criticó hoy que el Gobierno haya sido «incapaz» de hacer un mix energético «razonable y sensato» y de consensuarlo «con todos» con el fin de que el coste de la energía sea «más barata» en España. De esta manera, Rajoy estimó que la actual normativa con el carbón es la consecuencia «de una pésima gestión» por parte del Gobierno, al que acusó de hacer «demagogia».

En este sentido, Mariano Rajoy recordó que en España se paga la energía «mucho más cara» que en resto de países de la Unión Europea porque el Gobierno «ha vuelto a subir la luz, como también el gas, el butano o los trenes», lo que es la consecuencia directa de unas políticas «equivocadas» y de no haber sabido estar «a la altura de las circunstancias», añadió el líder `popular´.

Así lo declaró Mariano Rajoy durante su intervención en el acto de clausura de la I Cumbre del PP en el Exterior celebrada durante los dos últimos días en el Auditorio `Ciudad de León´, donde reconoció que la situación actual que vive España es «difícil» ya que el país está atravesando «una grave crisis» que no sólo tiene carácter económico, sino también «social e institucional».

Rajoy reconoció que a día de hoy su preocupación no se centra en el Gobierno, «si se le puede llamar así», sino que lo más importante para el PP es que «cuanto más tiempo estén ahí y tarden en darle la palabra a los españoles, más caro nos va a costar a todos lo que está pasando», dijo. El presidente nacional del PP consideró que «la mayoría de los españoles» actualmente «mira al PP», por lo que la obligación del partido es «estar a la altura de las circunstancias» y trabajar «como nunca» con el fin de «preparar el futuro y no defraudar a nadie», dijo.

El líder nacional del PP insistió en que España «necesita hoy un cambio político» que debe estar liderado «por el Partido Popular», en un proyecto de cambio en el que Rajoy aseguró que no se quiere «prescindir de ningún español» al ser un partido «abierto a todos».

Sobre la actuación del Gobierno en materia económica, Rajoy se preguntó «cómo se puede confiar en alguien que se comporta así a la hora de gobernar» basándose en la «ceremonia de la confusión» y en las «contradicciones» o los cambios de opinión «constante». Según Rajoy, el Gobierno está convencido de que hay que hacer reformas, aunque denunció que, tras la reforma de las entidades financieras y la reforma laboral, el Gobierno diga que «hay que reformar la reforma de las entidades financieras y la reforma del mercado laboral».

En este sentido, Rajoy apostó por tener «un criterio», aunque éste «sea malo», si bien estimó que «es mejor tener un mal criterio que dar bandazos e intentar salir al paso cada 24 horas». Para el presidente del PP «así no se puede gobernar» y la situación actual en España refleja que «estamos pagando las consecuencias de una actuación impropia de un Gobierno de una potencia como España».

Sobre las bases del proyecto político del PP para los próximos meses, Rajoy desgranó que es un proyecto «para todos los españoles» que crean «en una España plural», así como en el Estado de las Autonomías y en un Gobierno que haga las cosas «razonable y sensatamente».

También añadió que se trata de un proyecto «inspirado en el valor institucional de la concordia y de la unión entre los españoles» y que apuesta por la recuperación de valores como «la justicia, la distinción entre lo que es bueno y es malo, el trabajo, el mérito, el esfuerzo, la responsabilidad, la sensatez y el sentido común», dijo.

La «recuperación de valores» es otro de los pilares del proyecto liderado por Mariano Rajoy, ya que calificó como «tremendo» para España la existencia de un Gobierno «que no ha sido capaz de transmitir a los ciudadanos que hay que distinguir entre lo que está bien y lo que no está bien», añadió. Sin embargo, la ciudadanía tiene «valores arraigados» y son conscientes de que la recuperación de valores es «básico» para un país y para mejorar el bienestar de los ciudadanos, valoró Rajoy.

El proyecto político del PP también apuesta por una España «fuerte, fiable, respetada en el exterior» y que tenga claros «quiénes son sus aliados», que a juicio de Mariano Rajoy «son los países y los dirigentes que comparten los valores de democracia, libertad y derechos humanos» y que tenga una economía que sea la de los países «serios y fiables» y que no esté sometiendo a los ciudadanos «a los vaivenes que estamos soportando».

El objetivo final del proyecto `popular´ es «mejorar el bienestar de los ciudadanos para que la gente viva mejor», porque la situación actual que se está produciendo en España es «injusta», como se percibe en las tasas de paro entre la población joven, la aprobación «del mayor recorte de derechos sociales de la democracia», la congelación de las pensiones o la subida de los precios «para rematar el pobre nivel adquisitivo de los españoles». Una situación que ha tenido lugar «no por una maldición bíblica, sino porque ha habido en España un Gobierno que no sabe gobernar» y que se encargó de «dilapidar una herencia que le había dejado la mejor democracia» y que no está «a la altura de lo que es España».

Mariano Rajoy consideró que las cosas pueden hacerse «mucho mejor», y así lo hará el Partido Popular, porque el PP «sabe gobernar y sabe gestionar», que es «lo que necesita ahora». Rajoy auguró que cuando el PP llegue nuevamente al Gobierno hará «lo que hace la gente formal y la gente seria» que es la presentación en las Cortes «un Plan Económico para cuatro años», en el que se fijen objetivos y se den a conocer las medidas que se van a plantear, que es «la única forma de dar seguridad y certidumbre a los agentes económicos y sociales».