La Guardia Civil añade otro detenido y un imputado más al caso de la carne
La mitad de la partida incautada por el Seprona procede de Irlanda, Italia y Holanda
Agentes de la Comandancia de la Guardia Civil de León pertenecientes al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) procedieron ayer a la detención de una persona y han puesto a disposición judicial a otra más, que quedó en libertad pero imputada en un delito contra la Salud Pública, por su presunta participación en la comercialización de entre 4.000 y 18.000 kilos de carne de ganado bovino, ovino y porcino detectada a principios del pasado mes de diciembre en un matadero y una sala de despiece clandestina de León.
Fuentes de la investigación confirmaron a este periódico que la operación continúa abierta y es previsible que se produzcan nuevas detenciones puesto que todavía quedan muchos puntos del caso por concretar. Se ha certificado, por ejemplo, que la mitad de la carne decomisada era de procedencia italiana, irlandesa y holandesa y que el otro 50% restante era carne nacional.
La operación «Almarcar» se puso en marcha tras detectar la Benemérita hace dos meses la presencia de una partida de unas cuatro toneladas de carne de procedencia ilegal en una empresa de San Andrés del Rabanedo que alquilaba sus sistemas de refrigeración a otras firmas. La partida no disponía de los correspondientes registros de sanidad de la junta de Castilla y León y carecía de la documentación necesaria para conocer su trazabilidad.
Más de 18.000 kilos. El Seprona decomisó ayer alrededor de 18.000 kilos de carne y detuvo a seis personas, dos de las cuales han sido imputadas en un delito contra la Saluda Pública. Otras dos personas más han sido incluidas en esta imputación, tras las pesquisas realizadas ayer. No serán las últimas y es probable que el número de detenidos aumente en la jornada de hoy, aunque a este respecto la Guardia Civil no quiso confirmar nuevos detalles.
Al resto de los arrestados se les acusa de supuestos delitos de estafa y falsificación, por su participación en los hechos.
Una parte importante de la remesa llegó finalmente a la cadena de consumo. Desde un principio, los agentes del Seprona habían tratado de esclarecer si ciertamente existía la posibilidad de que ciudadanos de la capital y su entorno pudieran haber ingerido parte de la carne, extremo que ha sido confirmado, aunque no se ha aclarado de momento en que puntos.
No obstante, las autoridades insisten en enviar un mensaje de tranquilidad a la población, puesto que a pesar de que los controles no han detectado la existencia de estos alimentos, se descarta por completo la posibilidad de que puedan generar problemas para la población.
A tenor de las investigaciones que se están llevando a cabo, todo hace indicar que en origen, la remesa contaba con toda la documentación en regla. Sin embargo, en alguna parte del proceso de comercialización se sortearon los controles preceptivos.
A medida que avanza la investigación aparecen nuevos datos. Ahora se teme que la partida real que inicialmente se intentó colar en el mercado pudiera alcanzar los 40.000 kilos y que se haya ido introduciendo poco a poco de forma sigilosa en los puntos de distribución, para evitar levantar sospechas.
La titular del Juzgado de Instrucción número 5 de los de León mantiene el secreto del sumario para este caso. Alrededor de una decena de empresas de León, Astorga, Trobajo del Camino y Mansilla de las Mulas están siendo investigadas por su posible implicación en los hechos, aunque de momento se mantiene la cautela a este respecto y se mantienen los términos de la investigación tal y como estaban previstos.