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La reforma del Parador de San Marcos se retrasa al segundo semestre del año

Martínez justifica la demora en la planificación para hacer los trabajos sin cerrar

Martínez, en el centro, presidió la reunión con los directores y jefes de departamento de la zona No

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a. caballero | león
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Con «la que está cayendo», la obra de reforma del Parador de San Marcos tendrá que esperar hasta «el segundo semestre de este año», según confirmó ayer el presidente de Paradores de España, Miguel Martínez, quien explicó que «no se pueden tener muchos establecimientos en obras» al mismo tiempo. Una coincidencia que ya se produjo el pasado año con el cierre de los establecimientos de Villafranca, recién inaugurado, Cáceres y Cádiz, todavía por reabrir, que ocasionaron que la empresa estatal dejara de percibir «entre 6 y 7 millones de euros». «Cuesta mucho superar estas bajadas porque nosotros tenemos que sufragar las inversiones con recursos propios, ya que no recibimos fondos de los Presupuestos Generales del Estado», justificó el político leonés, quien había comprometido, cuando se presentó el proyecto en mayo del 2010, que los trabajos se iniciarían con la entrada del año 2011.

Martínez no se quedó en la falta de liquidez como justificación prioritaria del retraso, más si cabe cuando Paradores mejoró sus resultados «un 2% en el 2009 y un 1% más en el 2010», sino que argumentó que la demora es necesaria porque la obra se hará con el parador «abierto», lo que requiere «una planificación minuciosa». «Esto hará que tardemos sobre tres años y medio, en vez de dos, pero no nos podemos permitir cerrar las puertas», diferenció el presidente del grupo, quien comprometió que ni siquiera será necesario acudir a regulaciones temporales de empleo de la plantilla actual, que suma 130 integrantes, durante el tiempo que duren los trabajos.

El proyecto todavía no cuenta con la licencia de obras del Ayuntamiento, que ha exigido que se subsanen algunas deficiencias advertidas por los técnicos municipales, aunque Martínez se mostró confiado de que estarán subsanadas para cuando se adjudiquen los trabajos, en el segundo semestre del año, al igual que los permisos pertinentes de Patrimonio.

Los planos, dentro de la preservación de los valores monumentales del inmueble, proponen una reforma que afectará a las 224 habitaciones actuales, una intervención para hacer más funcional el edificio y una ampliación en la que cabrá un centro de convenciones para 600 personas y un spa abierto al público en general. Un proyecto de rehabilitación integral que costará cerca de «50 millones de euros».

Parador de Villablino. Martínez aprovechó además para ratificar que la obra del nuevo parador de Villablino, adjudicada a Turespaña, «es irreversible», dado que la tramitación del proyecto, que se levantará en el solar de las antiguas escuelas y el matadero, está «muy adelantada».

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