Herida una mujer en un brazo tras desprenderse un cascote de un piso
Los técnicos municipales achacan a las últimas lluvias los desprendimientos
Una mujer de 52 años de edad resultó herida en un brazo en la mañana de ayer tras desprenderse por culpa de las últimas lluvias una placa adherida a la balconada de un edificio situado en la calle Lope de Vega, en la confluencia de la calle Padre Isla.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 13.00 horas, cuando probablemente como consecuencia de los efectos de la humedad de los últimos días, cayeron varias piedras desde el balcón del quinto piso del inmueble.
Una viandante fue alcanzada por un cascote y sufrió heridas de carácter relativamente leve, a pesar de que la hemorragia que presentaba era medianamente aparatosa.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron varias dotaciones de la Policía Local y efectivos del Cuerpo de Bomberos de León, que procedieron a cortar el tráfico para evitar problemas en la circulación. También e personaron en el lugar de los hechos varios técnicos municipales para revisar la fachada del edificio, que no tiene más de 30 años. Fueron los propios técnicos los que apreciaron en un primer momento que las precipitaciones de la Semana Santa han podido estar detrás de este episodio.
Según informó el gabinete de prensa del Ayuntamiento, en una nota remitida en la tarde de ayer, el Consistorio ha ordenado a la comunidad de vecinos del inmueble donde se produjeron los hechos la instalación de un red y una bandeja de protección para evitar nuevos incidentes y que pueda causar daños a los viandantes.
Los técnicos municipales calculan que este sistema de protección pueda estar instalado ya en la mañana de hoy y a partir de ahí se podrán poner en marcha las labores de recuperación de la balconada.
Este último incidente se produce pocos días después del derrumbamiento de otro edificio, en este caso en el Casco Histórico de León. Un inmueble de dos plantas se vino abajo, también previsiblemente como consecuencia de las lluvias, en la mañana del Sábado Santo y en la calle Dámaso Merino, después de que las llamadas de alerta de los vecinos avisasen sobre el inminente desprendimiento de la pared principal de la casa, que había perdido la techumbre hacía ya algún tiempo.
Las labores de adecentamiento de la zona se iniciaron el mismo fin de semana prácticamente y los técnicos del Ayuntamiento calculan que se tardará aproximadamente una semana en terminar con toda la labor que aún falta.