La mitad de los titulados abandona León en busca de empleo cualificado
El 60% de los que terminaron la carrera en el 2005 cobran menos de 1.500 euros
La falta de empleo cualificado ha obligado a la mitad de los jóvenes que se graduaron en la Universidad de León en el 2005 a marcharse fuera para encontrar un puesto de trabajo. Además, seis de cada diez cobran menos de 1.500 euros y los egresados en Valladolid o Burgos tienen más fácil encontrar un puesto de trabajo que los que salieron de Vegazana y del Campus del Bierzo. Estas son algunas de las conclusiones del primer estudio que realiza una retrospectiva de la inserción laboral de los graduados y que han elaborado las fundaciones generales de las universidades de León, Salamanca, Burgos y Valladolid y junto con el Servicio Público de Empleo (Ecyl). Casi 2.300 jóvenes leoneses que terminaron su carrera en el 2005 han participado en este estudio respondiendo a más de 300 cuestiones diferentes. Una encuesta que dibuja un panorama positivo de inserción laboral para los titulados de Ciencias Experimentales, de la Salud y los ingenieros y, por el contrario, una situación laboral especialmente problemática para los que cursaron carreras de Ciencias Sociales y Jurídicas o Humanidades.
A pesar de la situación económica actual, ocho de cada diez egresados leoneses tienen empleo remunerado en la actualidad, si bien existen claras diferencias dependiendo de la carrera estudiada. Así, los graduados en Ciencias Experimentales o de la Salud (Enfermería, Veterinaria, Biología o Ambientales) tienen unas tasas de empleabilidad del 94%; en el caso de los ingenieros es del 92% mientras que en Humanidades (Filosofía, Filología o Geografía) desciende hasta el 73%; en el caso de los licenciados en Ciencias Sociales y Jurídicas (Derecho o Ciencias del Trabajo) es del 77%.
Situación actual. Por universidades, casi el 85% de los titulados del 2005 por la Universidad de Valladolid tienen trabajo en el momento de realizar el estudio, el 82% en el caso de Burgos, porcentaje que desciende al 80% para los titulados leoneses y al 77% para los del campus salmantino. Destaca que existen diferencias por sexos ya que los varones presentan mayores tasas de ocupación que las mujeres.
Precisamente la búsqueda de un empleo cualificado y bien remunerado es la razón de peso que provoca que la mitad de los titulados leoneses tengan que marchar fuera de la provincia e incluso de la Comunidad. Aún así, el 73% de los encuestados manifiesta que tiene intención de desarrollar su futuro profesional en su lugar de origen y tres de cada diez resaltan que su situación laboral ha mejorado en estos cinco años y una parte de ellos ha logrado regresar. Los ingenieros, veterinarios, enfermeros o biotecnólogos son los que se ven más obligados a marcharse fuera mientras que los titulados en Humanidades o Ciencias Sociales son los que tienen menos movilidad geográfica. De hecho, la tasa de ocupación de los que optan por desplazarse fuera tras finalizar sus estudios iniciales son significativamente mayores que la de los que se quedan.
En cuanto al mercado laboral, el estudio concluye que la demanda de trabajo por parte de las empresas en Castilla y León está centrada en Valladolid, Burgos y, en tercer lugar, León. De hecho, la provincia se sitúo en tercer lugar respecto al número de ofertas de empleo registradas el año pasado (17%). Una cifra, sin embargo, que duplicó Valladolid (30%) y que también superó Burgos (21%). Salamanca se quedó en el 7% y el resto se reparte entre las demás provincias de la comunidad: Zamora (5%), Palencia (5%), Soria (4%), Segovia (4%) y Ávila (4%). Por ello, los graduados en los campus de Valladolid y de Burgos gozan a priori de una importante ventaja en términos de empleo en perjuicio de León, debido al mayor desarrollo económico y empresarial de ambas provincias.
Cinco años después de terminar sus carreras, ocho de cada diez dice tener un empleo cualificado aunque, en muchos casos, no se corresponde con el salario. Así, menos del 20% de los encuestados reciben sueldos inferiores a mil euros, el 40% percibe entre 1.000 y 1.500 euros, un 30% entre 1.500 y 2.000 euros y sólo un 10% cobra más de 2.000 euros netos mensuales. Por cierto, que mientras el 70% de los ingenieros cobra más de 1.500 euros al mes, esta cantidad sólo la perciben el 25% de los licenciados en Humanidades. Las remuneraciones percibidas por los titulados difieren en función del sexo: los hombres, en promedio, cobran más que las mujeres; así, por ejemplo, sólo un 11,5% de los varones recibe remuneraciones iguales o inferiores a los 1.000 euros, frente a casi la cuarta parte de las tituladas.
Respecto a las características del primer empleo tras la formación inicial, un porcentaje alto entró en el mercado laboral con un empleo profesional de alta cualificación, sobre todo los ingenieros. En el otro extremo se sitúan los jóvenes que realizaron estudios de Humanidades y Ciencias Sociales, cuyo primer empleo fue de baja cualificación.
Los principales medios para encontrar el primer trabajo fueron, por orden de importancia, el envío de currículos (26,8%), las relaciones personales (22,6%), las ofertas de empleo anunciadas en los medios (15,7%) y los servicios de empleo de las universidades (8,6%).
