Diario de León

Descuidos que limitan la excelencia

La Universidad actualiza un inventario de deterioro del Campus cuya atención compete al Ayuntamiento

Las raíces de los árboles plantados hace más de dos décadas han agrietado de forma considerable la z

Las raíces de los árboles plantados hace más de dos décadas han agrietado de forma considerable la z

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nuria gonzález | león
León

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Desde que José Ángel Hermida accedió al rectorado de la Universidad leonesa, cada tres meses el vicerrectorado de Campus, a través de la Oficina Verde, se encarga de hacer un estudio pormenorizado de las deficiencias y necesidades de Vegazana que traslada al Ayuntamiento de León, ya que el mantenimiento del campus es competencia municipal, exceptuando los edificios que son asunto de la ULE.

Sin embargo, en los últimos tres años y pese a los informes y las reuniones periódicas de responsables universitarios con los concejales de las diferentes áreas el Campus muestra la misma cara: setos que invaden ventanas y calles, raíces que inclinan aparcamientos, bancadas de bicicletas deterioradas que no se cambian, contenedores rotos, aparcamientos sin señalización horizontal ni vertical, farolas fundidas, contenedores deteriorados... Incidencias que generan contínuos problemas de accesibilidad y seguridad, sin olvidar aquellas que inciden en el valor estético de la zona universitaria y que son fruto de denuncias diarias de alumnos, profesores y personal hacia la Universidad.

Una de las demandas presentes en dichos estudios y que la Universidad ha solicitado en reiteradas ocasiones al Ayuntamiento es que considere el Campus como Zona 30, dada la afluencia de peatones y la velocidad a la que circulan los vehículos.

De hecho, y según el informe de la ULE, el acceso a Vegazana por la avenida Nocedo, a la altura del hotel Campus San Mamés, es un punto peligroso para los peatones ya que los vehículos circulan a elevada velocidad. Por eso considera imprescindible tomar medidas para que los conductores circulen a velocidades más bajas.

Otra de sus solicitudes pasa por restringir al uso universitario las calzadas centrales del Campus y desviar el resto de tráfico por la ronda. De hecho, y según un estudio de la propia Universidad, la intensidad de tráfico que pasa por el Campus de Vegazana un día laborable es de 12.200 vehículos con unos porcentajes de vehículos pesados de 5,3%. Una cifra elevada ya que se suele utilizar el Campus como salida a la ronda este. La intensidad del tráfico disminuye a la mitad el sábado y a un tercio en domingo.

La institución académica también solicita que todos los universitarios pueden acceder al servicio de préstamo de bicicletas del Ayuntamiento, para lo que se requiere estar empadronados en León. Sin embargo, son muchos los alumnos y profesores que no tienen su registro en la capital y, por lo tanto, no pueden hacer uso de las bicicletas.

A este respecto, la ULE denuncia el estado de abandono y precariedad de algunos aparcabicis, como los ubicados en Biológicas o en la Facultad de Ciencias del Deporte. Por eso pide que el Ayuntamiento renueve aquellos que tienen más de dos décadas de uso y traslade aquellos que no se utilizan por inseguridad a los lugares en los que existe una fuerte demanda.

En cuanto a las zonas peatonales, en el lateral de las facultades de Filosofía y Letras y Derecho existe una calzada para acceder al Edificio de Servicios y a la Cafetería en la que se aparcan los coches y no dejan paso a los peatones. Por este motivo, la ULE ha solicitado en varias ocasiones que se construyera una acera en este trazado o, en su caso, establecer la señalización pertinente y que sea una zona sólo de carga y descarga.

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