La integración del ferrocarril en León avanza con la apertura de un nuevo paso peatonal
El vial conecta las calles Astorga y Gómez de Salazar, sustituyendo a la pasarela que salvaba la playa de vías de la estación histórica de León
El nuevo paso peatonal que une las calles Astorga y Gómez de Salazar en León se pone en servicio este viernes, una actuación que forma parte del proyecto de construcción del tramo Onzonilla-Estación de León, correspondiente a la Línea de Alta Velocidad Valladolid-Venta de Baños-Palencia-León, que impulsa el Ministerio de Fomento a través del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).
Esta actuación se incluye, así mismo, en las obras planificadas para la `Integración del Ferrocarril en León y San Andrés del Rabanedo´. El nuevo paso sustituye a la pasarela de `Los Quebrantos´, que salvaba la playa de vías de la estación histórica de León, cuya actividad cesó el pasado 18 de marzo tras la inauguración de la nueva estación de alta velocidad de la capital leonesa.
La entrada en servicio de la nueva estación de León ha liberado el corredor ferroviario tradicional de la ciudad, posibilitando entre otras actuaciones la supresión del histórico paso a nivel de El Crucero, una barrera para la movilidad y el desarrollo urbanístico de la capital al estar situado en un punto muy transitado de la avenida del Doctor Fleming. Este punto lleva abierto al uso público sin las limitaciones del paso a nivel desde el pasado mes de abril.
Además, la liberación del pasillo ferroviario ha permitido la prolongación del eje Ordoño II-avenida de Palencia hacia el oeste por lo que hasta esa fecha era la playa de vías de la estación histórica de León, inaugurada en 1863.
El nuevo paso se convierte así en el tercer elemento de transversalidad e integración urbana dentro de las actuaciones impulsadas en la ciudad de León por Adif y la Sociedad León Alta Velocidad, integrada por el Ministerio de Fomento, con una participación del 50 por ciento, la Junta de Castilla y León, con el 20 por ciento y los Ayuntamientos de León, con el 15 por ciento y San Andrés del Rabanedo, el 15 por ciento restante.
El vial evitará el complicado trazado elevado de la pasarela sobre las vías, conectando directamente las calles Astorga y Gómez de Salazar. Se mejora así la fluidez del tráfico peatonal y la permeabilidad transversal de la ciudad, salvando la barrera que históricamente ha supuesto la línea férrea y conectando el área occidental de León con el centro urbano.
Para la construcción del paso ha sido necesario el desmontaje de las rampas de acceso a la pasarela de `Los Quebrantos´ por sus dos extremos. En paralelo a la antigua pasarela, se ha construido un pasillo de 150 metros de longitud y 4,2 metros de anchura a cota de calle. El pavimento se ha rematado en aglomerado negro con una señalización horizontal que divide longitudinalmente el trazado en dos partes, con 2,7 metros de anchura para el tráfico peatonal y 1,5 metros destinados a carril-bici.
A ambos lados del pasillo se ha levantado un cerramiento mediante valla plastificada de 2 m de altura, idéntico al colocado en la prolongación del eje Ordoño II. Los trabajos de construcción han requerido la demolición parcial de los andenes de la estación histórica de León. Este nuevo vial mejorará notablemente la accesibilidad del ciudadano tanto a la nueva estación de alta velocidad como al centro urbano desde el arco noroccidental de la ciudad de León y sus alrededores.
La ejecución de este paso peatonal forma parte de los trabajos de integración de la Alta Velocidad en León, que consisten en la ejecución del pasillo ferroviario definitivo de entrada a la ciudad, el futuro soterramiento de las vías y la construcción de la estación definitiva, también soterrada.
La operación ferroviaria de integración se puso en marcha con la ejecución de las obras de plataforma y superestructura del tramo Onzonilla-Estación de León de la línea de alta velocidad a la capital leonesa, tramo que incluye la nueva estación inaugurada el pasado 18 de marzo. El proyecto contempla además la ejecución de obras relacionadas con la reposición de servicios y servidumbres afectadas y la construcción de conexiones transversales que aseguren la permeabilidad viaria y peatonal, como este nuevo paso.
Las actuaciones en el tramo Onzonilla-Estación de León, de cinco kilómetros de longitud, suponen una inversión de 23,3 millones de euros, y permiten liberar completamente el anterior pasillo ferroviario, posibilitando la ejecución del futuro corredor soterrado por una zona ya sin circulación de trenes.