Cuando el enemigo es el propio cuerpo
Nacen dos asociaciones en León contra los trastornos de la conducta alimentaria
La falta de recursos e información existente en León sobre los trastornos de la conducta alimentaria (anorexia y bulimia nerviosa) han reagrupado a familias y profesionales en dos asociaciones diferentes en León que buscan la investigación y la docencia, como es el caso de la Asociación Española de Enfermería y Salud; y la orientación e información a las familias, en lo que está volcada también la Asociación Apatca, de reciente creación en León.
«El servicio de salud mental de León está saturado, es insuficiente», asegura el presidente de la Asociación Española de Enfermería y Salud. Luis Miguel Alonso. La asociación, integrada por 300 profesionales de la Enfermería, ha diseñado un programa de educación y prevención para su divulgación en asociaciones e institutos. «Hay pocos programas de prevención en León, estamos hablando de una enfermedad psiquiátrica». El servicio de psiquiatría infanto juvenil de León se ocupa de las personas enfermas hasta los 18 años, pero no existe una unidad específica para abordar esta enfermedad por lo que los especialistas derivan a los pacientes con peor pronóstico a los centros de referencia en Valladoli y Burgos. Salamanca cuenta con un centro de día, de seguimiento en hospitalización y ambulatorio. «No existe un control de los pacientes, porque la mayoría recurre a la atención privada»», explica Isabel Revilla, coordinadora de la asociación, «el calificativo de enfermedad mental es su talón de aquiles. Da pánico porque te enfrentas a algo que no ves, no se acepta socialmente. No se le ha dado la importancia que realmente tiene».
Lo que la enfermedad esconde . Baja autoestima, problemas de personalidad, no aceptación del cuerpo, exigentes y responsables. El perfil de las personas más proclives a padecer la enfermedad convierte a la adolescencia es clave porque el carácter aún no está definido. Los cánones de belleza impuestos por la sociedad se ocupan de hacer el resto.
La falta de información dificulta a las familias una reacción rápida. Apatca ofrece en León un servicio de información y asesoramiento. «Hay pocos recursos públicos, pero buenos profesionales. Lo normal es que las familias se dirijan directamente a un psicólogo privado. La Junta sólo envía a Barcelona a los casos más graves pero cuanto más tiempo pasa más riesgo hay de que la enfermedad se cronifique, por eso es importante acceder a los mejores servicios desde el primer momento» explica Yolanda Gago, médica y presidenta de la asociación. Una experiencia familiar la motivó a poner en marcha la asociación, «me ví sola. Las comidas eran una tensión constante. Es importante que las familias no se sientan culpables, y para eso se necesita la ayuda profesional que atienda a todos los miembros de la familia».