Enerthi pondrá fin a la producción de penicilina en la planta de Antibióticos
El presidente anunciará el lunes al comité que paraliza la fermentación porque no es rentable
La fábrica de Antibióticos, tal y como había publicado DIARIO DE LEÓN, está parada. De hecho lleva parada casi un año, aunque este parón en la producción de la industria leonesa se ha hecho especialmente significativo en los últimos tres meses. Por esta razón, el comité de empresa solicitó ya en el mes de junio una reunión a la dirección del Grupo Enerthi, propietario de Antibióticos, para tratar de aclarar la situación de la fábrica. Finalmente, este encuentro se va a celebrar el lunes, una vez que el presidente del Grupo y de Antibióticos, Danielle Pucci, aplazó la reunión prevista para el miércoles, por motivos de agenda.
En ese encuentro, según ha podido saber este periódico, Pucci comunicará al comité de empresa la intención de dejar de producir y fermentar penicilina en Antibióticos. Y lo hará, siempre según las fuentes a las que ha tenido acceso el Diario, porque ya no es rentable.
Esto contradice lo dicho hasta ahora por los dueños de la fábrica leonesa que, incluso, llegaron a comunicar a los representantes de los trabajadores que iban a traer de China una cepa de penicilina más barata. Con ella estaba previsto que se avanzara en la fermentación del 6-APA. Pues bien, ahora ni lo uno ni lo otro. Antibióticos dejará la penicilina y, a cambio, Pucci anunciará al comité que se está negociando con hasta con cinco empresas, alguna de ellas coreana, para la puesta en marcha de nuevos productos.
Además, en el transcurso de esta reunión entre trabajadores y empresa, esta última avanzará otra posibilidad, la de fermentar en Antibióticos los betacarotenos que se producen en Vitatene, para lo que ya podrían haber iniciado los contactos con los nuevos propietarios, la multinacional holandesa DSM.
Contradicciones. Esta decisión contradice el plan industrial presentado por Enerthi hace apenas tres meses. Un plan que pretendía garantizar el mantenimiento de la plantilla (280 trabajadores) y que pasaba por centrar la producción en la fermentación de penicilina, en la fabricación de amoxicilina, ampicilina y nafcilina y en el trabajo experimental con una nueva cepa china, con la que se pretendía abaratar los costes.
Según anunció la propia empresa, la campaña de penicilina se prolongaría durante todo el año, mientras se fijaban las toneladas que se producirían en la planta leonesa a lo largo de este año.
El plan industrial incluia también mantener el proyecto de construcción de la planta de cogeneración, en fase de tramitación administrativa.
Exigencias. Los directivos de Enerthi tenían previsto reunirse el miércoles con el comité de empresa, un encuentro que fue retrasándose y finalmente se ha aplazado hasta el próximo lunes. En esta reunión la empresa debía comunicar a los representantes de los trabajadores la marcha del plan industrial presentado el pasado mes de marzo.
El presidente del comité de empresa, José Ignacio Ronda (UGT), señaló ayer que el lunes plantearán sus preocupaciones a la empresa, pero que no hará valoraciones sobre la marcha de la fábrica hasta conocer los datos de producción y los proyectos.
Por su parte desde el sindicato USO Néstor Santos insistió ayer en que Antibióticos «lleva un año prácticamente parada, con un nivel de producción que ronda el 40%». También señaló que la falta de materia prima, «que llega con cuentagotas», tiene prácticamente paralizada la actividad en la planta.
El representante sindical denuncia que el plan industrial actualmente en vigor «no se está cumpliendo, como no se ha cumplido ninguno de los que hasta ahora han anunciado las distintas multinacionales por las que ha pasado esta fábrica».
Santos hizo un llamamiento a las administraciones públicas para que «ayuden a esta empresa», e insistió en que resulta incomprensible que tanto las instituciones como los sindicatos mayoritarios «hayan permitido que se vendiera Vitatene, que era el salvavidas de esta empresa». Incluso calificó de desfalco la polémica venta.
También lamentó el sindicalista que «se siga acusando a Antibióticos de recibir permanentemente subvenciones», cuando la realidad es que «la situación de la empresa está entre mal y muy mal, y llevamos un año denunciando la paralización de la planta mientras se ha dejado pasar el tiempo en que era posible reaccionar».
Santos pidió al PSOE y al Gobierno que expliquen qué ha pasado con las subvenciones comprometidas «en plena campaña electoral», y que no han permitido que la empresa haya mejorado una situación que considera crítica.