Granizo no seduce al Grano
Cautela de los vecinos, que exigen el mantenimiento del carácter y la fisonomía de la histórica plaza, ante los planes de rehabilitación de la concejala de Urbanismo
Todos están de acuerdo en la necesaria remodelación de la plaza del Grano. Sin embargo, difieren en cómo debería realizarse, con lo que al final se terminan formando dos bandos: los comerciantes y hosteleros, que cruzan los dedos por que las reformas no hagan perder la esencia popular de la plaza, y el Ayuntamiento de la ciudad que planea sacar un concurso de ideas a nivel internacional para elegir un proyecto ganador que se encargue de darle un lavado de cara al mítico enclave.
La propuesta número 21 del alcalde, Emilio Gutiérrez, sobre la remodelación de la plaza del Grano, dejó en un principio comentarios escépticos entre los asiduos a la plaza, que no creían que fueran a llevarse a cabo las obras para reparar todo lo que el tiempo y el paso de los viandantes han deteriorado. Pero ahora la concejala de Urbanismo, Belén Martín Granizo, ha dado a conocer las actuaciones que desde el Ayuntamiento planean llevar a cabo.
Las obras de rehabilitación se iniciarán, previsiblemente, en marzo de 2012. Antes, en septiembre de este año, dará comienzo el concurso internacional de ideas para elegir el proyecto que dará lugar a una remodelación completa de la plaza del Grano. Los participantes tendrán que respetar necesariamente en sus proyectos el carácter popular de la plaza y de todo lo que en ella se encuentra.
Al contrario de lo que desde el Ayuntamiento creen respecto a la idoneidad de los plazos elegidos, los hosteleros discrepan, ya que piensan que les hará más daño que bien. Así, señalan que sus bares y restaurantes perderán clientela si las obras coinciden con la Semana Santa y, más aún, si se prolongan hasta el verano, ya que es con la llegada del buen tiempo cuando la plaza se llena de vida.
Las pasarelas flotantes y el velador de invierno también son motivo de recelo. Los hosteleros demandan que se ensanchen, pero no quieren que la pasarela obligue a retirar el empedrado. Por otra parte, las obras deberían realizarse en invierno. Pero es en esta estación cuando el Ayuntamiento piensa instalar los veladores que permitan mantener las terrazas, aún cuando el buen tiempo no acompañe.
Ecologistas en Acción advierte de que esas actuaciones «alterarán el paisaje de la plaza y no se podrán realizar sin suprimir parte del pavimento, que es el más antiguo de la ciudad». El colectivo manifiesta a través de un comunicado que este enclave precisa «sólo obras de conservación; su aspecto actual de abandono se debe a que ningún gobierno municipal se ha preocupado de acometer sencillas obras de mantenimiento desde su restauración en 1980». Recalca, al igual que vecinos y hosteleros, que el encanto fundamental de esta plaza reside «en su empedrado».
Respecto a la financiación de estas obras de rehabilitación, el equipo de gobierno apuntó el viernes que aunque no existe presupuesto, tiene pensado acudir a subvenciones de los planes de movilidad europeos, según comentó la edil de Urbanismo, Belén Martín Granizo.
Además, el plan contempla también la intervención en las dos calzadas que rodean la iglesia del Mercado y que dan acceso a esta emblemática plaza de la capital.