«He vivido en centros de menores desde que recuerdo»

«No nos salió malo el niño». La frase es de Mercedes Gago Salinas, madre de acogida desde hace casi cuatro años de Christian Fernández. Ella y su marido, Rafael Rabanal, sacaron a Christian y su hermano del centro donde estaban tutulados por la Junta en Cistierna. Era la primera vez que salían. «He vivido en centros desde que recuerdo», asegura este joven tímido, esquivo a contar sus sentimientos y receloso de la cámara. «Lo mejor que recuerdo de aquellos años son los compañeros. Lo peor la falta de libertad a la que nos obligaban las monjas. Nos daban muchas órdenes». Ahora tiene 18 años y está integrado en esta familia numerosa. pero cuando llegó a Marne recuerda que sintió vergüenza. «Al principo no quería que me trajeran a mi hermano porque no lo soportaba, pero ahora, después de estar con la familia, lo comprendo mejor». Asegura que está muy bien, por eso ha decidido quedarse pese a que la mayoría de edad le da libertad para elegir. La familia ha aceptado que se quede. «Mi paso por esta familia me ha aportado confianza, ellos miran por mí». Ahora estudia para ser Policía. Su padre murió y a su madre biológica la ve cada quince días. «tengo una relación difícil con ella, se preocupa por mí y valora que esté bien».