Caño Badillo ya no puede más
Los vecinos de esta calle entre el casco histórico y el Ejido denuncian el nivel de ruidos y el estado de un solar abandonado que se ha convertido en un basurero.
Los vecinos de la calle Caño Badillo lanzan una llamada desesperada al Ayuntamiento. No pueden más. Por el alto nivel de ruidos, por la suciedad que se ha adueñado de un inmueble donde se iban a construir pisos y por carencias básicas como la falta de aceras lo suficientemente amplias como para transitar cómodamente por esa calle de transición, entre el casco histórico y el barrio del Ejido.
La situación más acuciante es el estado en que se encuentra una antigua casa señorial, en cuyo interior se acumula cada vez más basura. El parón de la construcción dio al traste con la construcción de viviendas de lujo en el inmueble. El edificio, según denuncian los vecinos, está abandonado desde hace tres años y se ha convertido también en refugio de mendigos, debido a que la valla que lo protege es provisional y no impide la entrada de transeúntes a la zona, cuando no es derribada sin más en algún acto vandálico.
«Este edificio abandonado es utilizado como urinario, hogar de gatos, basurero... Es un auténtico estercolero», asegura uno de los residentes en la calle.
Los vecinos echan en falta una mayor atención teniendo en cuenta que es paso obligado no sólo de los vecinos del Ejido y Santa Ana, sino para muchos turistas que utilizan el parking de la Plaza Mayor, cuya entrada en por Caño Badillo, o disfrutan con dos de los distintivos de la calle, la Torre de los Ponce y la Fuente del siglo XVII, obra del maestro arquitecto y aparejador de la catedral, Pedro Crespo del Valle
1397124194 Otras protestas. Los ruidos son otra de las grandes reivindicaciones de los vecinos. En este caso por la presencia sobre todo de un pub, con el nombre de la calle, que hace imposible el descanso durante las noches del fin de semana. Aunque tiene varias denuncias vecinales, la situación no se ha corregido.
Además, los vecinos denuncian la escasa presencia policial en la calle teniendo en cuenta que es una zona de paso hacia barrios muy poblados de la capital.
El día después a una noche de copas suele dejar botellas abandonadas o contenedores tirados.
La calle Caño Badillo ha sido siempre en cierta medida la calle ‘pobre’ de la zona monumental de León. Situada al lado de la Catedral y del Barrio Húmedo, apenas se ha beneficiado de obras municipales ni de planes para mejorar su aspecto. El plan para liberar la Muralla ha tenido siempre una asignatura pendiente en la entrada a esta zona extramuros y la Fuente, que se llama así porque estaba «a la espalda» de un mesón con el mismo nombre, es convertida en muchas ocasiones en una papelera más, aunque desde hace un par de años presenta un aspecto mucho más limpio.
El tráfico es otra exigencia de los vecinos, en este caso para que se regule de igual forma que ocurre en otras zonas de la capital. Los coches aparcan a ambos lados dejando un carril de paso muy estrecho, con el consiguiente peligro también para los peatones.
Los vecinos ya han dirigido sus quejas al Ayuntamiento.