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Caléndula crea en la ULE un piloto de virtualización de puestos de trabajo

El Centro de Supercomputación propone «poner en valor» sus recursos en las empresas.

Al encuentro con Redondo asistieron empresarios y representantes de la Universidad.

León

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La Fundación Centro de Supercomputación de Castilla y León está desarrollando un proyecto de virtualización de puestos de trabajo, cuyo piloto lleva a cabo en la Universidad de León, que tiene como objetivo «la minimización de los costes y la optimización de recursos», tanto en las administraciones públicas como en las empresas. Así lo explicó ayer el director del centro, Carlos Redondo, durante un desayuno tecnológico organizado por la Asociación Leonesa de Empresas de Tecnologías de la Información y la Comunicación (Aletic).

Redondo explicó que el sistema de virtualización es aplicable tanto a la gestión como a la producción, y se llevará próximamente a los centros escolares. «De ahí se extrapolará a la administración pública, para desarrollar después las aplicaciones que puedan realizarse en las empresas».

El responsable del supercomputador Caléndula destacó las ventajas que ofrecen los nuevos servicios en la nube para optimizar costes y recursos, e hizo hincapié en las ventajas de que «el sistema informático deje de ser un problema, ya que al estar completamente deslocalizado se prescinde también de los costes de gestión que llevan implícitos los medios digitales».

En este sentido, señaló la actitud pionera de la Universidad como «paradigma del cambio de modelo organizativo y de gestión», y animó a aprovechar las ventajas de contar con el Inteco, especialista en seguridad y accesibilidad, para «desarrollar el liderazgo en el traslado de servicios a la nube».

En el encuentro con responsables universitarios y con empresarios tecnológicos, Redondo abogó por estas fórmulas, especialmente rentables y eficaces en «una administración tan deslocalizada como Castilla y León».

Sobre todo, y junto con el presidente de Aletic, Joaquín Ramírez, el director de la Fundación hizo un llamamiento a «poner en valor los recursos del supercomputador para desarrollar nuevos modelos de gestión». También Ramírez animó a los empresarios a utilizar las capacidades que ofrece el supercomputador para escalar y simular proyectos que permiten acceder a nuevos mercados. «Hay que aprovechar la ventaja competitiva que tenemos en León», y también las convocatorias públicas de ayudas a la investigación, vinculando las ideas empresariales a la innoación que se realiza en la Universidad.