«Unir el leonesismo no produce ningún beneficio»

Es como el guadiana. Aparece y desaparece en política. Y ahora al leonesista Alejandro Valderas le ha tocado aparecer, eso sí lejos de León en «territorio regional», como procurador de la UPL en las Cortes de Castilla y León.

Como buen «archivero», tal y como él se define, tiene todos los datos en la cabeza y los va soltando minuciosamente y al detalle. «Y es que es necesario sentarse a negociar, a ver lo que queremos hacer y no a aplicar y aplicar recortes y modificar leyes de un día para otro», asegura Alejandro Valderas en un momento de su intervención en El Filandón, la tertulia que organizan La 8 de Castilla y León Televisión y el Diario de León.

Esa es su premisa, ese es su modus operandi, el que aplica a su forma de trabajar, lo que él denomina «simple organización y criterio». Algo que, entiende, falta por ejemplo en el caso del consorcio del aeropuerto de León, que él lo tiene claro «es una castaña pilonga, que no sirve para nada». Eso sí, cuando se le pregunta qué hacer con él, recula y sentencia: «Hombre un archivero no va a tener la solución para arreglar el aeropuerto». Pero dicho esto, Valderas aplica el razonamiento y explica que «se debe organizar el consorcio con todos». Lo que sí tiene claro es que no sobra ninguno, ni Burgos, ni Valladolid, ni Salamanca ni, por supuesto, León. «Yo no quiero que cierren ninguno, porque todos valen», remarca.

«Lo que hay que hacer con el consorcio —continúa— es darle el fin como negocio aeropuertuario que debe tener». Pero el procurador de la UPL en las Cortes de Castilla y León, también sabe quién puede darle ese fin: «Un economista que sepa y sea capaz de atraer vuelos, pero uno por cada consorcio».

Alejandro Valderas califica de «iluso» al alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, cuando dice que se cierren todos los aeropuertos y que sólo quede el de Valladolid, «pero sino tiene ni papeles», afirma un sorprendido Valderas, que explica que no entiende cómo nadie se da cuenta que el aeropuerto de Valladolid está en la misma línea de vuelo que el de Madrid, «es incomprensible». «Hay que reorganizar», insiste y quien debe hacer esta reorganización, según el leonesista, es la Junta de Castilla y León.

«La Junta debe tener informes. A mí me consta que los tienen, que existen. Entonces, ¿por qué no se aplican?», se pregunta un sorprendido Alejandro Valderas, que vuelve otra vez a echarse a un lado a la hora de aportar una solución. «Hago lo que puedo. Yo he llegado a plenos en las Cortes donde me ponen el orden del día en el momento y ahí me dicen cuándo intervengo y sobre qué y así voy saliendo adelante y lo vamos haciendo bien», manifesta.

La UPL reescribe su papel. Sobre la UPL deja claro que no le atrae una posible fusión del leonesismo. «¿Para qué?», se pregunta y se contesta con otra interpelación: «¿Para atraer a cinco concejales de cinco lugares distintos y que no aportan nada?».

El procurador tiene claro que el papel que está haciendo la UPL en este momento es que se debe seguir manteniendo. «Pretendemos apuntar ideas y debates. No pierdo un minuto en decir que eso es mentira. Yo, a las Cortes, voy a preguntar y a aportar ideas para lograr cosas y, a veces, lo conseguimos», explica un convincente Alejandro Valderas. Y señala como logros del Grupo Mixto el que las Cortes vayan a conocer los sueldos de las cajas o los contenidos reales de las obras sociales.

Ese, entiende Valderas, debe ser el camino que tiene que seguir su partido. «Unificar el leonesismo no produce ningún beneficio, porque no se puede evitar que justo en el momento de las elecciones estos que vinieron recuperen unas nuevas siglas del leonesismo, que alguien registró, y se presente por otro partido», remarca, para concluir: «Ahora estamos haciendo partido, que antes, en los últimos años, no se hacía».

«Todo lo domina el dinero». El debate, en palabras de Alejandro Valderas, está viciado por la crisis. «Todo lo domina el dinero», indica para arrancar criticando con dureza la Ley de Medidas Fiscales que éste martes aprobarán las Cortes de Castilla y León. Una ley que Valderas califica de «desastre», de «chapuza» y que presenta hasta 25 puntos de «ilegalidad».

«Se trata de una ley con 69 artículos y 60 disposiciones adicionales, que han tenido siete meses para debatirla y aprobarla y que la vamos a aprobar en dos horas de debate», manifiesta casi con resignación.

Pero es una ley, que el leonesista califica como «cajón desastre», porque por incluir incluye hasta el dopaje en el deporte o las exenciones fiscales del jeugo y los casinos, «con los que por cierto sí que llevan negociando seis meses», puntualiza.

Pero, además, esta Ley de Medidas Fiscales va a significar, en palabras de Alejandro Valderas, «el fin del dinero para los Centros Logísticos (Cylog), a los que califica de ‘económicamente inviables’».

Valderas lo tiene claro: «Castilla y León está en bancarrata, aunque no no los dicen». Una bancarrota que sólo tiene un culpable, según el procurador de la UPL, el Partido Popular que lleva gobernando 28 años esta Comunidad. «Aquí hay órganos que no tienen contenido, pero que se reúnen; no tiene sentido», indica.

El procurador leonesista no duda a la hora de definir qué es lo que se está haciendo mal y por qué no funciona Castilla y Léon. «Aquí cuando se reparten los presupuestos, la mitad son para Valladolid y la otra mitad para el resto. Todo está en Valladolid», afirma rotundo. Y finaliza: «La Junta construye un castillo en Valladolid abandonando al resto de provincias».