Descienden los tramos de vías peligrosas y de concentración de accidentes
La seguridad en la red de carreteras nacionales de Castilla y León se ha incrementado en el último año, según se desprende de un informe realizado por el Real Automóvil Club de España en el que se analiza la siniestralidad vial y el índice de riesgo en estas vías teniendo en cuenta el número de accidentes de los últimos tres años. Aunque a mucha distancia, después de Ávila se encuentra la provincia de León con dos tramos en la N-536 y la N-630, que suman 30 kilómetros y un balance de 16 accidentes graves. En Zamora sólo se encuentra un tramo, en la N-122, y lo mismo ocurre en la N-234 a su paso por Soria, aunque en este caso se han registrado cinco accidentes con heridos graves y dos con fallecidos. En el informe de RACE también se alerta del incremento del número de accidentes con motoristas implicados con relación al resto de usuarios.