Los hosteleros hablan ya de pérdidas
Tradicionalmente es la época de mayores ingresos para la hostelería. La Semana Santa inunda la capital de miles de leoneses y turistas que quieren disfrutar de las procesiones y del extraordinario ambiente de estas vacaciones, con unas costrumbres tan arraigadas como las limonadas y las tapas ligadas a la vigilia.
Unas fechas que se viven fundamentalmente en la calle y que, según los hosteleros, la lluvia ha arruinado parcialmente. Hablan de pérdidas en el sector de alrededor de un 30% sobre los ingresos previstos.
Menos gente en la calle y una merma considerable de turistas, de acuerdo a sus cálculos. Recientemente, el presidente de la Asociación Leonesa de Comerciantes (Aleco) cifraba en seis millones de euros el movimiento económico generado durante la Semana Santa en León en los sectores del comercio y las hostelería.
De todas formas, tendrán que esperar al Domingo de Pascua para realizar una valoración global de estas vacaciones, ya que a pesar de la lluvia los bares y restaurantes están teniendo una gran afluencia.