Fallece una de las atropelladas el jueves y la otra ingresa en la UCI
La conductora alega que la esclerosis múltiple que padece pudo afectarle.
La víctima que permanece en la UCI, en el momento de ser asistida.
Teresa Burrull Forcada, una de las dos víctimas del espectacular atropello que se produjo a mediodía del pasado jueves en pleno centro de León, falleció la misma noche en la que se produjo el siniestro como consecuencia de las graves heridas que presentaba a su ingreso en el Complejo Hospitalario Asistencial Universitario de León.
Pese a que inicialmente no se temía por su vida, un examen más completo del estado que presentaba detectó un fortísimo traumatismo craneo-encefálico, que finalmente acabó con su vida.
La fallecida, de 88 años de edad, tenía tres hijos y recibirá sepultura esta tarde a partir de las 18.00 horas en la iglesia del Mercado de la capital.
La otra víctima del atropello también sufrió un empeoramiento notable horas después del accidente y hubo de ser ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos. Se trata de una mujer de 58 años, que presenta fracturas y traumatismos múltiples en el abdomen y el tórax, así como daños de importancia en algunas articulaciones.
La Policía Local tomó declaración ayer a la conductora del vehículo que protagonizó el accidente, una mujer de 38 años de edad, hija de un reputado procurador de la capital. El automóvil, al parecer, es propiedad de una persona que sufre un problema de visión que le impide conducir. Ella lo conduce habitualmente para trasladarlo aunque en el caso de la colisión del jueves, en el momento de los hechos, se encontraba sola. Se dirigía a casa de sus padres para realizar una visita y tras abandonar la calle Independencia, a la salida de la curva para enfilar Santa Nonia, perdió el control del vehículo y se empotró contra el Bar Sidi. Las dos víctimas circulaban por la acera y resultaron atropelladas.
Esclerosis múltiple
En su defensa, la conductora baraja la posibilidad de alegar que un proceso de esclerosis múltiple que padece desde hace tiempo, y por el que percibe una pensión de invalidez, pudiera haber provocado un problema de respuesta motriz a la hora de reaccionar ante un imprevisto. No obstante, la Policía Local entiende que si está en posesión del permiso de conducir y ha superado los exámenes médicos pertinentes, está en disposición de circular sin problemas y no entra a valorar esta posibilidad.
La investigación continúa abierta a la espera de que se complete el atestado pertinente y de que se puedan recabar nuevos testimonios para esclarecer de forma definitiva cuáles fueron los motivos del accidente y qué responsabilidades son las que se deben depurar a estos efectos.