La bajada de tasas aumenta un 23% el número de terrazas en la ciudad
El Ayuntamiento registra 549 autorizaciones, de las cuales 89 son para todo el año.
Los hosteleros esperan que acabe el mal tiempo.
A la espera de que escampe, los hosteleros de la ciudad sacan el negocio a la calle. Más que nunca y con más persistencia, como demuestran los datos del último padrón de terrazas. Un total de 549 autorizaciones, que suponen un crecimiento de más del 23% con respecto a los números del 2011. Cifras que se disparan como contestación a la bajada de un 50% de la tasa y la necesidad de incentivar la oferta para los clientes fumadores que abandonaron el consumo en bares y cafeterías el pasado año. Con un poco de espacio disponible en aceras y plazas, florecen las sillas y mesas mientras se invoca la llegada del buen tiempo.
La confluencia de la bajada de la tasa —la única que ha decrecido, frente al aumento del resto de las ordenanzas fiscales— y el aumento de las autorizaciones posibilita que la merma de ingresos prevista por el Ayuntamiento sea menor. Pese a que calculaban que la administración municipal perdería cerca de 125.000 euros con la medida, al final la diferencia queda en 76.245 euros, dado que los recibos del 2012 ascienden a 128.727 euros y en el 2011 se recaudaron 204.872 euros.
El incremento se mide además en función de las dos posibilidades de autorización: por temporada, que va desde la semana anterior a Semana Santa y hasta el 31 de octubre, y por todo el año. Dos opciones que, a partir de este 2012, se regulan mediante la imposición de una carga del 20% para quienes soliciten permiso para instalarlas del 1 de enero a 31 de diciembre. Poco más de 8 euros de diferencia en las calles de 1º y 2º categoría —de 44,17 a 53,01 euros por cada velador, formada por una mesa y cuatro sillas—, casi 6 euros en las de 3º y 4º —de 29,50 a 35,40 euros— y cerca de 3 euros en las de 5º y 6º —de 14,80 a 17,76 euros. Un margen de cantidades muy pequeño que ha animado a que 87 de las 549 autorizaciones sean por el ejercicio completo.
Más de año completo
Serán más todavía, como se advierte desde el consistorio, donde continúa la gestión del cambio de los periodos de disfrute y se espera que una vez puestos al cobro los recibos muchos establecimientos soliciten la ampliación. Una disponibilidad que les permite sacar las mesas y las sillas a la calle a poco que salga el sol como reclamo para los clientes. Sobre todo para los fumadores, a los que no frenan ni siquiera las bajas temperaturas y se han apostado durante todo el invierno bien abrigados en las terrazas que se han colocado con regularidad, en zonas como el casco histórico.
El resultado de todos estos factores hace que en las próximas semanas, toda vez que la lluvia abandone la ciudad, empiecen a aparecer terrazas en todas las calles y esquinas de la ciudad, más si cabe con el buen tiempo. Una apuesta de los hosteleros de la capital leonesa para tomar la calle mientras escampa la crisis.