Nuria Lesmes pone nombre y apellidos a los 274 despidos del Ayuntamiento de León
El margen de negociación se limita a 57 contratos por cese de servicios o reorganización, según la lista .
Nuria Lesmes, en primer plano, en el último pleno municipal
No son todos los que están, pero sí están todos los que pueden ser. La concejala de Personal y Régimen Interior, Nuria Lesmes, ya ha entregado a los representantes sindicales el listado en el que se pone nombre y apellidos a cada una de las 274 plazas del expediente de regulación de empleo. Un documento en el que se contabilizan 87 temporales a los que no se renovará, 40 personas por el cierre de servicios, 17 empleados a los que se rescindirá el contrato con argumentos económicos y de reorganización, y 88 excedencias; así como otros 33 contratos, señalados en otro documento paralelo y pertenecientes a ex trabajadores de matadero y agua que ahora están en otros puestos, a los que se mantendrá en nómina a condición de que renuncien a los complementos de cerca de 360 euros mensuales que, por ley, arrastran por la prestación de sus anteriores tareas. Sin nominar quedarían las jubilaciones, que son cerca de una decena, según informó esta misma semana el alcalde, Emilio Gutiérrez.
El listado de Lesmes se encuentra sobre la mesa de negociación en estos momentos, antes de que el día 27 de este mes se cierre el periodo de consultas. Un plazo en el que el equipo de gobierno ha reseñado que cabe buscar alternativas para algunos contratos de los afectados por cese de actividad o por razones económicas y de reorganización, ya que las 274 plazas suponen una cifra de máximos, no de mínimos. Excepciones, sin cerrar aún, que se librarán de los 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 anualidades, con los que se indemnizará de acuerdo a las condiciones de la nueva reforma laboral.
Menos será el desembolso para los temporales, a los que no se concede salida, como ha repetido Lesmes. No se renovarán —72 a final de este mes y 15 el 31 de diciembre— con el argumento de que hay un real decreto del Gobierno que lo impide, a pesar de que los sindicatos insisten en que los que hubieran sumado 2 años con anterioridad al 26 de agosto del 2011 son reconocidos por la administración como «eventuales indefinidos». Un debate que no impide que en las previsiones se fije la indemnización de 8 días por año trabajado, como recoge la reforma laboral, a la que se agarra el equipo de gobierno para el expediente de regulación.