León pierde 500 empleados públicos en los últimos meses, según sindicatos
La cifra se estima sin haber incluido aún los más de cien que se ejecutarán en el consistorio de la capital leonesa en los próximos mese
Los sindicatos han calculado en cerca de 500 los puestos de trabajo que se han destruido en las administraciones locales de la provincia en los últimos meses.
Los representantes del sector público de CCOO y UGT de León han denunciado esta mañana en rueda de prensa la destrucción paulatina de empleo público que se está llevando a cabo en los entes locales de la provincia donde el volumen de empleados ha pasado en los últimos meses de 7.224 a menos de 6.800.
Según los cálculos de los sindicatos, son alrededor de 500 los empleos destruidos en los distintos ayuntamiento de la provincia sin haber incluido aún los más de cien que se ejecutarán en el consistorio de la capital leonesa en los próximos meses.
Ante esta destrucción de empleo en el sector público que, a juicio del secretario general la FSC-CC.OO en León, Xosepe Vega, va a servir «sólo para desmantelar el Estado Social», ambos sindicatos ha convocado este mediodía una concentración a la entrada de los ayuntamientos de León, Ponferrada y San Andrés del Rabanedo.
En el caso de la capital, la protesta ha sido secundada por cerca de sesenta personas.
Vega ha sostenido que la política de ajustes en las plantillas municipales se apoya en «argumentos falsos» como que el recorte de personal es la vía para salir de la crisis, que las plantillas están sobredimensionadas y «se ha desarrollado el discurso de que sobran funcionarios».
En este sentido, ha puesto de manifiesto que León es la provincia de Castilla y León con menos empleados públicos por habitante, «6,36 funcionarios por cada cien habitantes».
A pesar de reconocer la preocupación de los sindicatos por la falta de equilibrio presupuestario y gestión eficiente de los ayuntamientos, el sindicalista ha abogado por que en lugar de «despidos» se debería «mejorar la gestión de los ingresos» porque «no entra el dinero que debería de entrar».
Según Vega, los planes de ajuste en las plantillas municipales van a acabar con «el municipalismo» y ponen «en riesgo el Estado Social» porque «si desmantelas ayuntamientos, desmantelas servicios públicos».
Por otra parte, el responsable del sector público en UGT León, Nicolás Sanz, ha criticado la «gestión nefasta de los políticos» en las administraciones locales que «han dado servicios a modo de favores políticos sin sopesar su sostenibilidad» y ahora «pretenden criminalizar a los empleados públicos y hacerles responsables de esta situación».
Sanz ha considerado además que el plan de proveedores constituye un «gravísimo error político para este país» y que tanto la reforma laboral como el plan de proveedores forman parte de un diseño del Ejecutivo nacional «para dar la salida a la crisis que les ha interesado políticamente que lleva a su forma de entender los servicios públicos».