Medel garantiza que la fusión de la Caja estará plenamente operativa en octubre
Asegura que hay remanente para conservar «dos o tres años» la Obra Social. El presidente de Unicaja apuesta por «conservar el liderazgo» en sus territorios.
La fusión de Caja España-Duero con Unicaja culminará «antes de que finalice el próximo otoño». Así, lo anunció ayer el presidente de Unicaja, Braulio Medel, quien destacó «la solvencia» de la futura entidad». Un proyecto de integración, que está «encarrilado» y va a «buen ritmo», y que, además, «cuenta con el liderazgo en las dos comunidades donde se asienta». «Aún manejando las hipótesis más negativas, el capital de solvencia supera el 10%. Un porcentaje que no exige prácticamente nadie», puntualizó.
Medel realizó estas declaraciones después de mantener —junto con el presidente de Caja España-Duero, Evaristo del Canto— la primera reunión institucional con el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera.
En este encuentro —según explicó Medel—, Herrera ofreció a la futura entidad un «apoyo claro y firme» de la Junta. «Casar los intereses con los territorios donde trabajamos es básico y el desarrollo conjunto de las actuaciones, fundamental», aseguró Medel.
El proceso de integración se producirá «antes de finales de otoño» y concluirá con la unión, «en términos financieros», de la comunidad más extensa de España —Castilla y León— y de la de mayor población —Andalucía—. Una fusión en la que ambas entidades pretenden mantener «su liderazgo» para continuar «siendo fuertes» en los territorios «donde nacieron», aunque «el nuevo banco surja con vocación de recorrido nacional».
Halagos a la Comunidad
El presidente de Unicaja vinculó la «solvencia» del proyecto al «buen» comportamiento económico de Castilla y León. «Esta Comunidad ha sido de las que mejor se ha comportado de toda España; la quita según el Gobierno y la primera según la Fundación de Cajas», destacó, y añadió: «Tenemos confianza en el futuro de Castilla y León, si no fuera así no hubiésemos firmado ninguna fusión», resumió Medel.
Eso sí, en cuanto a la participación en proyectos estratégicos para Castilla y León, aunque defendió el compromiso con el territorio donde trabajan ambas entidades, advirtió de que no llevarán a cabo proyectos «inviables o que supongan una sangría de dinero».
Además, manifestó el compromiso de ambas entidades de mantener una obra social «suficiente» en los territorios donde desarrollan su trabajo, y destacó que dejan «un remanente» destinado a conservarla durante los próximos «dos o tres años» ese patrimonio. «Nuestra vocación será atender a todos los clientes de manera equilibrada y equitativa, según criterios justos de peso poblacional o en función de las necesidades», puntualizó.
Medel también habló de los procesos de la reducción de plantilla y de gastos que negocian cada entidad con los representantes laborales, y aseguró que se hubiera producido «de todos modos, con o sin fusión». Tras estas negociaciones —explicó—, la nueva entidad llevará a cabo otra conjunta en la que los sindicatos podrán elegir qué sistema utilizarán para reducir gastos.
«Hemos hecho estructuras que, en los nuevos tiempos, son exageradas. Tenemos que reducir los costes, eso es irrenunciable», aseveró.