León pide reprogramar la integración del AVE mediante obras parciales

El Ayuntamiento de la capital leonesa anunció ayer que ha solicitado al Grupo Fomento que sean los socios de la sociedad León Alta Velocidad 2003, gestora de la integración del AVE, quienes asuman «los trabajos a desarrollar en aras de seguir continuando con todas las actuaciones de integración en nuestra ciudad y el entorno». Una propuesta que haría que fuesen el Ministerio de Fomento, la Junta y los consistorios de León y San Andrés quienes «liderasen» la iniciativa, por medio de la «redefinición y reprogramación del proyecto a base de actuaciones parciales, adecuados a cada momento, con una planificación temporal acorde con la disposición de crédito que se necesite en cada momento para cada intervención concreta», como explicó la concejala de Urbanismo, Belén Martín-Granizo.

El nuevo modelo propuesto pasa por «disolver la estructura gerencial que actualmente está en funcionamiento, con cuatro personas», y que sean «técnicos cualificados, tanto del Ayuntamiento como del resto de administraciones» quienes ejecuten estas funciones para «evitar duplicidades»; además de que apostó por que sean estos «medios humanos propios» quienes propicien «una reducción de la carga inversora de los proyectos, que están encargados y externalizados fuera».

El esquema funcional, que debe autorizar Fomento, partiría de la base de prescindir del planteamiento «actual en el que todo está vinculado entre sí al 100%», para lo que se había solicitado «un crédito abierto avalado por las administraciones». «Una operación crediticia de 300 millones vinculada a la desafectación de suelo para desarrollo inmobiliario hoy en día es totalmente increíble», reseño Martín-Granizo, quien abundó en que «ese modelo de financiación no puede ser a día de hoy vender suelo, ya que son un millón de metros cuadrados que no tienen comprador, algo que sabe un niño de 4 años y ya se sabía hace 4, 5 ó 6 años». Críticas que mezcló con el hecho de que «ni siquiera se ha procedido a la desafectación de los terrenos urbanísticos», que son propiedad del ministerio, para que «sean un aval claro, no ficticio».

kjgs

Martín-Granizo subrayó que esta «redefinición» no implica que se renuncie «a los objetivos de la integración», aunque cuestionó el modo de abordar «de forma vinculada» una infraestructura «faraónica de 430 millones de euros», a la que hay que sumar «un sobrecoste de 158 millones de euros que se comprometieron de forma verbal, de facto, que serían asumidos por parte del Ministerio de Fomento». Un compromiso dado por «un presidente del Gobierno que ya no está y una ministra que ya no está» y que se hizo para prolongar el soetrramiento otros dos kilómetros y que llegara hasta superar el Lidl de San Andrés, en vez de quedarse nada más atravesar el paso a nivel del Crucero, como se había planificado de forma inicial.

Dentro de este planteamiento de «redefinir el proyecto en el escenario que corresponda a cada momento, no vinculado a una operación faraónica y no hacer nada», el Ayuntamiento apostó por «priorizar la construcción del polígono ferroviario de Torneros», en el que está previsto unir Clasificación y blos talleres de material motor y remolcado, con «un empleo vinculado importante». «Queremos que se racionalicen las inversiones, fragmentándolas, para tener un sitio por dónde empezar y preparar el camino para que con el presupuyesto del 2013 se puedan hacer actuaciones», apuntó la edil de Urbanismo de León, quien mencionó que ha solicitado al Gobierno que aclare «cuál es el nuevo modelo global nacional de infraestrucuturas ferroviarias». «En función de ese modelo defenderemos la importancia que tiene Torneros para nosotros por el empleo», comprometió.