Antibióticos reconoce problemas para pagar la nómina del mes de agosto
Antibióticos suma nuevos problemas. Al expediente de regulación de empleo en marcha se une ahora la imposibilidad de abonar la nómina de agosto, según trasladó ayer la dirección al Comité de Empresa. La farmaceútica espera poder hacerlo a lo largo del mes de septiembre, incluida la parte proporcional de las pagas extras. En la reunión, los sindicatos exigieron a los directivos que sea la empresa quien anuncie oficialmente el retraso y no descartan volver a denunciar individualmente el impago de la nómina en Trabajo, como ha pasado ya en meses anteriores por el mismo problema de no cumplir con la fecha de pago.
Antibióticos está teniendo problemas para abonar las últimas mensualidades, incluso antes de que presentara el expediente de regulación de empleo temporal por el retraso en la puesta en marcha de su gran proyecto alternativo a la penicilina con Amyris, para la producción de farneseno. Antes de aprobar el ERE, los sindicatos ya exigieron a la empresa que se pusiera al día en el pago de las nóminas a los trabajadores.
Por parte de Antibióticos asistieron ayer a la reunión el director de Desarrollo Corporativo, Pedro Ruiz; el controller de fábrica, Jorge Guervos, y el director de Recursos Humanos, Miguel Ángel Rodríguez.
Expediente en marcha
Desde hace algo más de un mes, Antibióticos mantiene un expediente de regulación de empleo que afecta a 173 de sus 303 trabajadores y que, en principio, tendrá una duración de nueve meses. El ERE fue aprobado por la plantilla, en un referendum con muy baja participación, con el compromiso de que si las condiciones económicas mejoran se pueda adelantar su conclusión.
Antibióticos, empresa que preside el italiano Danielle Pucci, alegó para su presentación en Trabajo esos problemas con Amyris para el farneseno, un producto para desarrollar proyectos relacionados con nuevos combustibles y la producción de plásticos a partir de la caña de azúcar como materia prima.
En un comunicado, el pasado mes de junio, la empresa aseguró que se trataba de una «suspensión temporal» y que el ERE no era la solución pero sí el medio necesario para garantizar a medio plazo las nuevas líneas de producción. Pese a los problemas, Antibióticos asegura que mantiene su plan industrial, que incluye tanto las líneas tradicionales de penicilina y derivados como nuevos campos de actuación estratégicos en biotecnología, investigación y desarrollo.
Diversificación
Es más, la compañía trasladó a los sindicatos que es importante cumplir en los próximos nueve meses los proyectos de ampliación y diversificación y apeló «a una responsabilidad mutua y un espíritu de esfuerzo común para afrontar la situación» y «garantizar un futuro estable para una de las instalaciones más dinámicas, sostenibles y con mayor capacidad de Europa».
Los sindicatos exigen que la empresa sea clara y demuestre con hechos su apuesta por la fábrica leonesa, algo que hasta el momento y a la vista de los acontecimientos entienden no está siendo así.