La ordenación territorial llegará antes del 2013 con o sin norma nacional
El presidente del PP de Castilla y León y de la Junta, Juan Vicente Herrera, insistió ayer en el carácter «rabioso y radicalmente municipalista» del nuevo modelo de ordenación del territorio que diseña el Ejecutivo Autonómico. Un modelo que verá la luz antes de 2013 y, previsiblemente, después de que se apruebe la reforma de la Ley de Bases de Régimen Local prevista por Rajoy para octubre o noviembre de este año—. «La norma nacional introduce novedades de carácter básico que son de obligado cumplimiento para las comunidades», señaló Herrera, quien advirtió de que si la reforma del Gobierno central no viera la luz antes de 2013, la Junta remitirá igualmente a los Cortes su «proyecto de ley de Ordenación de Servicios y Territorio de Castilla y León» que contemplaría posibles cambios o revisiones.
Para Herrera la reordenación territorial forma parte de las tres prioridades básicas de su Ejecutivo—junto a la recuperación del empleo y la sostenibilidad de los servicios esenciales— porque muchos pueblos de la Comunidad son «endebles económicamente», advirtió.
Así, aconsejó a «los cientos» de municipios, que «posiblemente» no puedan cumplir con la prestación de servicios que tienen encomendada, que se unan a las «mancomunidades de interés comunitario». «La inmensa mayoría son personas anónimas sin retribuciones que solucionan el día a día en los pueblos. Deben reagruparse de forma voluntaria», explicó, y sintetizó: «Es la venda antes de recibir la pedrada».
Línea de financiación
Herrera también anunció que las denominadas ‘mancomunidades de interés comunitario’ contarán con una línea específica de financiación que estará garantizada por ley y que la Junta abordará las denominadas competencias impropias de las administraciones locales. Además, insistió en que se potenciará el papel de las diputaciones como apoyo a los pequeños municipios y deseó que tanto los municipios urbanos como rurales reciban los mismos servicios y con igual calidad.