Recurrido ante el juzgado el cierre del Sagrado Corazón
La Diputación consensúa una moción aprobada por unanimidad.
El bufete de abogados que representa a los padres de los alumnos del Colegio Sagrado Corazón, que ha sido cerrado este curso por la falta de acuerdo entre la Junta de Castilla y León y la Diputación Provincial, ha presentado un recurso ante el Juzgado Decano de León para oponerse a la denuncia del convenio en cuestión, que ha dejado sin servicio a los estudiantes de educación especial que hasta ahora venían recibiendo sus enseñanzas en este centro.
El gabinete considera que la denuncia del convenio es ilegal y solicita que se dicten las medidas cautelares correspondientes para que los alumnos puedan recuperar de nuevo el servicio que se les venía prestando. La Junta manifestó hace pocas semanas que el convenio no se prorrogó por decisión de la Diputación y el gobierno provincial sostiene que fue la Administración autonómica quien dejó de responder hasta en cuatro ocasiones las propuestas del Palacio de los Guzmanes para renovar el convenio.
Los abogados que defienden a los padres de los alumnos solicitan que se suspenda la medida adoptada por la que el centro escolar se cierra y que en su lugar se decrete algún tipo de sistema de sustitución que evite que los muchachos carezcan del servicio que se les prestaba. Consideran los letrados que en apenas unos días habrá respuesta a la cuestión por parte del juzgado de lo Contencioso-Administrativo al que le corresponda el asunto y al que se le solicitan medidas provisionalísimas.
El procedimiento se inicia en virtud de la consideración de que se ha producido una lesión a los derechos fundamentales de los estudiantes y los profesionales de la abogacía que se han hecho cargo del asunto tienen claro que no siguen ningún tipo de instrucción política en este asunto, máxime teniendo en cuenta que se trata de dos instituciones del mismo color político y que hasta ahora, en las gestiones que han querido llevar a cabo, la Junta de Castilla y León ha colaborado de forma muy receptiva en todos los asuntos en los que ha sido necesario.
Junta y Diputación mantenían un acuerdo en virtud del cual los estudiantes disponían de un servicio de educación especial que desde el ámbito provincial, se entendió que se iba a suspender después de que hasta cuatro escritos quedaran sin respuesta en Valladolid cuando se pidieron explicaciones en torno a la posibilidad de que no se renovara el convenio.
La Diputación Provincial aprobó por unanimidad una moción consensuada entre los tres grupos con representación política, en la que instan a la Consejería de Educación a que ejerza sus competencias «y garantice una escolarización especializada que favorezca la promoción de su autonomía personal».
También reitera «la plena disposición de la Diputación Provincial de León a la utilización del Colegio Nuestra Señora del Sagrado Corazón, como residencia de escolares, con los medios personales de la Consejería de Educación de la Junta de Castilla y León».
«Antes del comienzo del curso escolar, a primeros de septiembre de 2.012, la Diputación se dirigió a la Dirección Provincial de Educación, interesándose por la situación de los alumnos, respondiendo ésta que no existía ningún problema». En todos los casos, desde Valladolid se informó siempre de que no existía ningún problema.