El nuevo puente de los Maristas estará terminado antes de final de octubre

La brecha abierta en Álvaro López Núñez ya empieza a encontrar un horizonte de unión. Un nuevo puente para los Maristas que empieza a atisbarse en los últimos días, después de que los operarios hayan echado la planchada de hormigón colocada sobre la estructura de cimbra llena. La placa que servirá para restablecer la circulación del tráfico y peatonal antes de final de mes, según confirman desde la dirección de obra de la compañía Feve.

La previsión permite acercarse a los plazos que se plantearon cuando se cortó la avenida el 16 de julio. Cerca de tres meses de obra, según se reseñó entonces, que se sobrepasarán en poco más de una semana si se sigue con el avance actual de los trabajos. Labores que se han centrado en conectar todas las infraestructuras de servicios, tales como redes de saneamiento y abastecimiento, por dentro de la placa del puente, cuyo hormigonado tiene que guardar ahora un periodo de cerca de 20 días para fraguar por completo.

Este tiempo se aprovechará para avanzar en la urbanización del puente, que tendrá un acabado recto para que libren los trenes-tram para acabar con el arco que había antes. En la superficie, se colocarán las vallas metálicas que harán las veces del antiguo pretil rematado por las piedras de afilar —que han sido guardadas para colocarlas como recuerdo en el parque de San Mamés— y se adecuarán las nuevas aceras a ambos lados, que serán todavía más anchas que las que había antes. Todo un proceso que, con los tiempos del hormigón cumplidos, se rematará con el asfaltado de la calle para que antes de final de mes se pueda restablecer la circulación.

En paralelo a los remates del puente, en los próximos días se empezarán a ejecutar las nuevas escaleras de acceso desde Ramón y Cajal. Descartado el modelo de las antiguas escalerillas de piedra, que ya han sido demolidas, la nueva infraestructura tendrá un rampa accesible para personas con problemas de movilidad con una subida en forma de L. Diseño que no estará terminado al mismo tiempo que se restablece la comunicación en Álvaro López Núñez, sino que se demorará unas semanas más.

Para entonces está programado que se acometa la obra de la rampa de los Maristas y la nueva puerta de acceso al centro, que no puede comenzar hasta que se termine el puente. Una parte más de un proyecto que en el sector de la estación ya tiene marcada la traza por la que volverá a ponerse la superestructura de vía de entrada de los trenes, mientras se continúa con la urbanización de toda la traza desde La Asunción. El cierre de una integración ferroviaria que está emplazada para su estreno en el primer semestre del 2013.