el presupuesto del ajuste. LAS REACCIONES ANTE LAS NUEVAS CUENTAS
El PSOE denuncia que «a este paso» el AVE tardará doce años en llegar a León
El PP responde que sus cuentas «no sólo contemplan las partidas, sino que las pagan».
El proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el 2013 deja a la provincia «al borde del precipicio», y si no se producen enmiendas los dirigentes populares leoneses será «cómplices de miles de despidos el año que viene, del cierre de las minas como habían previsto ya Rajoy y Carrasco, de la desaparición de autónomos en contra de lo prometido en la campaña electoral, de la desaparición de las explotaciones ganaderas y del aislamiento de nuestros pueblos. Estas cuentas colocan a León en el estado más crítico de toda la etapa democrática». Así lo denunció ayer el secretario provincial del PSOE, Celestino Rodríguez, que realizó un primer análisis del proyecto acompañado de los diputados y senadores socialistas por León. Un análisis que irán desgranando «por apartados» en los próximos días.
Rodríguez denunció que en dos años (desde que el PSOE dejó el Gobierno) los presupuestos de la provincia se han reducido en una cuarta parte, y han provocado un retroceso social alarmante. Incidió en que los recortes presupuestarios en obras tan importantes como la línea de alta velocidad provocarán que el AVE no llegue a León hasta el 2025. «Faltan por invertir 1.100 millones de euros para terminar la línea, después del fuerte impulso que le dió el Gobierno de Zapatero. Si el PP sigue invirtiendo cien millones al año (los presupuestos recogen 188, pero sólo 100 son obras en la provincia según el PSOE); faltan doce años para que se termine la obra».
El dirigente socialista denunció también el «ataque sin precedentes a la minería», y lo injusto de unas cuentas que «no gravan al que tiene más pero castigan a las rentas más bajas; congelan de nuevo el sueldo a los funcionarios pero incrementan las partidas de los altos cargos; rebajan más del 6% el presupuesto de prestaciones por desempleo pero no dicen nada del sueldo de Isabel Carrasco, que es el doble que el de Rajoy».
Por su parte, el diputado José Antonio Alonso advirtió de la importancia de que incluso cuatro presidentes de autonomías gobernadas por el PP hayan criticado los presupuestos, que «son sólo de recortes, sin ningún estímulo a la economía, lo que supondrá estrangular y dificultar la salida de la crisis».
Las críticas socialistas fueron respondidas ayer por el secretario de Organización del PP leonés, Eduardo Fernández, quien en referencia al supuesto retraso de la alta velocidad aseguró que «no sólo llegará mucho antes de lo que dice el PSOE, sino que ahora además de incluir en los presupuestos las partidas se van a pagar. Y eso no se hacía antes».
Fernández denunció la «herencia» recibida del Gobierno de Rodríguez Zapatero, que «lo hacía fácil porque incluía grandes partidas, pero luego ni se ejecutaban ni se pagaban». Y destacó el «esfuerzo» del proyecto para el 2013, un presupuesto que calificó de «realista y ajustado a lo que hay, priorizando aquellas obras que son más urgentes».
Respecto al recorte a los fondos mineros, Fernández respondió «todos aquellos que el año pasado hablaban de los 111 millones de euros y el recorte del 63% que suponían deben estar contentos, porque este año tienen 153 millones. Así que suben». No quiso entrar en detalles sobre las partidas recortadas, pero pidió «coherencia y mantener el mismo discurso».
Tiempos mejores
Por su parte el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, reconoció ayer que la obra nueva «va a tener que esperar tiempos mejores», en alusión al escueto capítulo destinado en los Presupuestos Generales del Estado para 2013 a infraestructuras. «Es verdad que en el ámbito viario esos recursos públicos van a destinarse a continuar las obras ya comenzadas y a conservar las autovías», dijo. «La obra nueva, sin renunciar a ningún objetivo, va a tener que esperar y eso no nos tiene que ruborizar a la hora de plantearlo, porque antes reclamábamos y ahora reclamamos con menor intensidad», añadió, en alusión a la exigencia sobre tal infraestructura en las dos anteriores legislaturas.