León se encomienda a San Froilán para que vele por las víctimas de la crisis

Un nuevo día 5 de octubre amaneció un año más para los leoneses. El día grande, el de su patrón San Froilán, en el que la provincia viste sus mejores galas, llegó de nuevo a las vidas de los miles de paisanos que se acercaron en tradicional romería a la Virgen del Camino para asistir a la multitudinaria eucaristía, celebrada en la explanada trasera de la basílica.

Las peticiones para los más desfavorecidos por la grave crisis que azota el país se convirtió en el punto central de la tradicional misa, el acto más significativo de la jornada de ayer. El alcalde de León, Emilio Gutiérrez, rompió el protocolo en las peticiones al Santo patrón para referirse a todos aquellos que sufren la peor cara de la crisis económica.

Acompañados de carros y pendones, cientos de personas fueron aproximándose hasta el descampado, que este año, le costó más llenarse, para escuchar la misa de campaña en ofrenda a la Virgen del Camino, patrona de León.

Un intenso sol, que acompañó toda la jornada y provocó alguna que otra lipotimia entre los presentes, amenizó la tradicional celebración, en la que se dieron cita autoridades civiles, religiosas y militares. Entre lo más destacado, la ausencia del obispo de León, Julián López, que se encuentra en Roma de viaje «para llevar a cabo labores eclesiásticas», según comunicó el sacerdote que ofició la concurrida eucaristía.

El momento de las peticiones a San Froilán estuvo protagonizado por Emilio Gutiérrez, quien rompió el protocolo para pedir «muy especialmente por todos los leoneses que sufren el desempleo, que no tienen una vivienda, que no gozan de cobertura sanitaria o por todos aquellos que han tenido que emigrar fuera de su tierra», dijo el edil.

Poco a poco, decenas de personas fueron acercándose a la zona de cabecera para comulgar y poner así fin, con varios cantos religiosos, a uno de los actos más tradicionales de y para los leoneses.