El Complejo Asistencial de León pone en marcha la primera resonancia magnética digital de la Comunidad
La gran novedad es que la señal es digital en la propia antena receptora, gracias a lo cual, la información se transmite por fibra óptica hasta el ordenador principal
Los profesionales del Complejo Asistencial de
León ya se encuentran trabajando con la primera resonancia magnética digital
‘Ingenia’, de 1.5 teslas de Philips, que se instala en Castilla y León y que
aportará beneficios tanto para los sanitarios como para, sobre todo, los
pacientes del centro, según informó la compañía de iluminación. La gran novedad
que aporta la nueva máquina es que la señal de resonancia magnética es ya
digital en la propia antena receptora situada junto al paciente, gracias a lo
cual, toda la información se transmite posteriormente por fibra óptica hasta el
ordenador principal.
Los demás equipos de resonancia magnética utilizan
cables convencionales que llevan las señales analógicas en el peor de los casos
incluso hasta la sala técnica, situada en una habitación contigua a la sala de
resonancia magnética. Con este nuevo equipo los estudios son mucho más precisos,
contienen más información y el tiempo de estudio se acorta considerablemente.
Este avance se traduce, en definitiva, en exploraciones más cortas, más precisas
y menos angustiosas para los pacientes.
En el caso del Complejo
Asistencial de León, esta resonancia se utilizará tanto para las exploraciones
más sencillas como para las más complejas. El jefe del servicio de Radiología
del centro, José María Jiménez, explicó que el Complejo Asistencial de León, que
ya en su día fue “el primero” en la sanidad pública en instalar una resonancia
magnética, ha apostado ahora por una de carácter digital porque se cree que este
sistema “es la antena del futuro”, de manera que se está apostando por “un
futuro que se adaptará a nuestras necesidades y a las de la población de León”.
Respecto a las diferencias con la resonancia magnética convencional, el doctor
Jiménez destacó el alojamiento para el paciente, que pasa de 50 a 70
centímetros. Junto a ello, la menor longitud del imán hace que se puedan evitar
episodios de claustrofobia, que son frecuentes en los pacientes que se someten a
este tipo de pruebas.
En el caso del Complejo Asistencial de León, esta
resonancia trabajará al servicio del equipo de neurología para el diagnóstico de
tumores, afecciones inflamatorias, traumáticas o degenerativas. “En el área de
neurología con este equipo se pueden realizar estudios funcionales muy
específicos, ya que podemos dibujar en el cerebro fibra a fibra estructuras
nerviosas de tal manera que cuando el paciente tenga que ser operado, el
cirujano sepa qué fibras están afectadas y, en la medida de lo posible, cuáles
puede respetar”, añadió.
El área cardio-vascular se verá también
beneficiada por el uso de esta nueva tecnología, ya que gracias a ella se
reducirán los tiempos de adquisición en estudios cardiacos complejos, además de
ofrecer más espacio para la colocación de antenas, entre otras mejoras. También
se podrán obtener representaciones muy extensas de todo el mapa vascular del
organismo y determinar muchos tipos de patologías estenóticas,
arterioescleróticas, aneurismáticas o tumorales, con más facilidad. Lo mismo
ocurrirá con el área musculo-esquelético, donde, con las novedosas antenas
digitales, se estudian las articulaciones con una calidad de imagen muy alta, en
un mínimo espacio de tiempo.