Hermida antepone mantener a los empleados frente a la reforma de Minas

El rector de la Universidad de León, José Ángel Hermida, señaló ayer su compromiso para mantener en la medida de los posible los actuales puestos de trabajo, lo que conlleva una reorganización interna de la institución que se está estudiando. La reducción de ingresos y de subvenciones económicas han hecho que la ULE tenga que buscar la forma de ser más eficientes.

Hermida aclaró que «antes de que haya despidos en la Universidad existe la obligación de buscar otras medidas de ahorro». Y es que una redistribución de las facultades es la alternativa principal para conseguir una notable reducción de los gastos. «Una de las cuestiones en las que se puede ahorrar es en la utilización eficiente de los edificios», señaló el rector. La Escuela de Ingeniería de Minas necesita muchos arreglos —añadió—. Por ejemplo, adecuar la instalación eléctrica supondría una inversión de más de un millón de euros, lo que significaría acabar con 40 puestos de trabajo. Visto así, entre eso y arreglar la luz de una facultad es lógico que busque otras alternativas».

El proyecto de reorganización de la ULE pasa por la posibilidad de integrar la Facultad de Ciencias del Trabajo con la licenciatura de Derecho y crear así la Facultad de Ciencias Jurídicas y del Trabajo. Aunque aún no se ha precisado su destino, una de las posibilidades podría ser la actual Escuela de Minas, que se encuentra en el centro de la ciudad cuyas instalaciones están algo anticuadas para impartir una ingeniería de estas características.

Reorganización

De esta forma, el rector de la ULE aseguró que una de las vías es la creación de un edificio de ciencias jurídicas, «pues en ningún sitio está escrito que cada titulación tenga que tener un centro exclusivo para ella sola». «El objetivo —añadió— es aprovechar la utilización de un edificio para tener que evitar despedidas de profesores».

Ante una posible sobrexplotación del espacio en el caso de agrupar las titulaciones en el edificio de Minas, Hermida recordó que «el día tiene 24 horas y la facultad puede estar abierta más de 12 horas si es necesario para repartir el tiempo y el espacio».