Alicia García señala que es un «gran error» el cierre de Paradores

Clara y rotunda. Así se mostró ayer la consejera de Cultura y Turismo, Alicia García, en el Pleno de las Cortes donde mostró «una postura firme de oposición frontal» al cierre temporal de Paradores en la Comunidad, «y más si se trata de establecimientos del medio rural».

Así, anunció que su departamento ha realizado distintas gestiones para hacer llegar el «malestar» que supone esta decisión a la Junta. «Hemos hablado por teléfono para trasmitirles nuestro rechazo sobre este planteamiento al ministro y a la secretaria de Estado», explicó García, quien anunció que el próximo jueves se reunirá con el comité intercentros —donde están representados trabajadores y directivos— en la mesa de negociación del ERE. La oposición frontal de la consjera contrasta con otra más dócil del alcalde de León, muy criticada por los trabajadores de San Marcos. Otra de las citas que aparecen en la agenda de la consejera para intentar evitar estos cierres, y que ayer recordó ante la cámara, es la reunión el viernes 14 con la presidenta de Paradores. «Les estoy exponiendo hechos y no meras declaraciones», dijo dirigiéndose a la bancada socialista.

Por su parte, el leonesista Alejandro Valderas, que se encargó ayer de llevar este tema al Parlamento Autonómico, pidió a la consejera que «utilice» las inversiones que han realizado la Junta y los ayuntamientos en apoyo de estos establecimientos como arma de «coacción».

«El Ayuntamiento de León les gestionó la licencia de obras y les cede unos jardines y un parking municipal. A lo mejor deberíamos recordárselo», le dijo con sarcasmo a la consejera, a quien felicitó por «haber arrancado», al tiempo que le recordó que los Paradores son «las playas de Castilla y León». «Pido a la Junta que no permita que se reduzcan ni sus horarios ni sus plantillas», concluyó. La consejera advirtió de que «no hay una decisión tomada» al respecto, aunque reconoció que los cierres están previstos para el 3 de enero. También señaló que los ciudadanos tampoco «están dispuestos a pagar los errores de gestión del anterior Gobierno socialista». «En 2004 la red estaba completamente saneada y contaba con unos beneficios de 20 millones, ahora las pérdidas ascienden a 77», señaló García, quien reiteró que deben tomarse medidas para reflotar.