La caja que quiso ser internacional
Caja España-Duero tiene oficinas en 49 provincias de todo el país, y cuenta con sucursales en 14 poblaciones portuguesas.
Un cliente saca dinero de un cajero del Ceiss.
Banco Ceiss tendrá que prescindir de 250 de las oficinas que tiene abiertas si Bruselas acepta el plan de reestructuración aprobado ayer por la dirección de la entidad financiera. Lo que supone reducir un 25% su capacidad actual, que ronda las 900 sucursales. Fuentes de la entidad señalaron ayer que el plan que se envía a la Comisión Europea contiene las líneas generales del proyecto de reducción de capacidad que tendrán que llevar a cabo, pero que es a partir de la aprobación de estas líneas la próxima semana cuando habrá que comenzar a negociar y poner «nombre y apellido» a las oficinas que desaparecerán y a los empleados que se verán afectados por el recorte.
En cualquier caso, la reducción se llevará a cabo principalmente fuera de la zona histórica de las cajas locales, de forma que «las entidades vuelvan a su negocio tradicional y se dejen de aventuras».
En la actualidad la suma de oficinas de Caja España y Caja Duero, una vez acometido ya el proceso de reducción de duplicidades tras la integración de ambas entidades, asciende a algo menos de 900. Que están repartidas por un total de 49 provincias a lo largo de todo el país, muy por encima por tanto de lo que se considera su «territorio histórico» (básicamente la Comunidad Autónoma).
Aunque buena parte de ellas están localizadas en ciudades y pueblos de Castilla y León, el proceso de expansión llevado a cabo por las entidades en los últimos años les llevó a intentar captar mercado en el mayor número de provincias posible, y uno de sus objetivos entonces fue estar presentes en todas las autonomías.
Más allá, Caja España siguió una vocación de internacionalización que la llevó fundamentalmente a abrir mercado en el vecino Portugal. Actualmente Banco Ceiss cuenta con sucursales en catorce poblaciones lusas.
La plantilla
Por otro lado, la plantilla de Caja España-Duero ronda en la actualidad los 4.700 empleados. La previsión de la dirección, y así lo proponen a Bruselas, en reducirla en algo más del 21%, hasta dejarla en unos 3.700 trabajadores.
También en este caso es previsible que la reducción afecte especialmente a las zonas donde se llevó a cabo el proceso de expansión en los últimos años. De todas formas, ahora se abrirá el proceso de negociación con los representantes sindicales, y como ha ocurrido en ocasiones anteriores se intentarán articular las medidas para ofrecer «la solución menos traumática posible al proceso de reducción de puestos de trabajo».