La antigua estación, símbolo del actual abandono
La vieja estación de tren es el vivo ejemplo de lo que está pasando. Las vías cortadas, los andenes abandonados, las puertas cerradas... Como si no hubiera pasado nada. Nada en el sentido de que el anunciado soterramiento se ha retrasado sine die por falta de financiación. La estación provisional, que puede ser la estación durante décadas de León, es un fondo de saco, cuando León era cruce de caminos para Asturias, Galicia y la Meseta... Tampoco la ampliación de Ordoño se ha convertido en una salida alternativa de León, aunque en este caso, porque acaba de ponerse en funcionamiento el Acceso Sur, que libra a los vehículos del tramo más congestionado, justo la zona de Antibióticos en dirección a Onzonilla. Y otro dato: ya hay hasta quien hace un rodeo por la rotonda al lado de la estación.
Todos los proyectos ferroviarios de León están paralizados, empezando por la llegada del AVE. Cuando José Blanco llegó a León para inaugurar la estación provisional y cerrar el paso a nivel del Crucero, la construcción de la alta velocidad apenas avanzaba ya camino de la capital leonesa.
Cierto es que en los últimos años también se hicieron obras, como el by-pass que evita que el tráfico de mercancías pase por León o el edificio CRC para el control de todos los trenes del AVE del Noroeste. Está casi finalizado pero no tiene equipamiento. Otro ejemplo de cómo están las cosas.