Los sindicatos creen «insuficiente» aún el acuerdo de 1.320 despidos en la Caja
Más de 2.000 trabajadores se manifestaron ayer en Salamanca para rechazar el ERE.
Más de 2.000 trabajadores de Banco Ceiss (Caja España de Inversiones, Salamanca y Soria S.A.), procedentes de diferentes puntos del país, protagonizaron ayer una concentración en la sede central de la entidad en Salamanca, para mostrar su rechazo al ERE (Expediente de Regulación de Empleo) con el que se pretende realizar un recorte en la plantilla.
Según explicó uno de los representantes del sindicato UGT en la mesa de negociación, Pedro González, aunque en la última reunión mantenida el pasado viernes la empresa rompió con su «inmovilismo» inicial, las cifras que pusieron sobre la mesa de 1.320 despidos siguen siendo «insuficientes» para alcanzar un acuerdo. Sin embargo, reconoció que este avance supone un «punto y seguido», ya que recordó que se partía inicialmente de los 1.502 despidos. Por ese motivo y como muestra de «buena voluntad», decidieron desconvocar la huelga de los días 29 y 30 de abril y la del día 1 de mayo.
González calificó la noticia de la inyección económica de 604 millones de euros del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, FROB, como de «positiva» al evitarse así la nacionalización y sentar las bases para la fusión con Unicaja. Además, confesó que este proceso lo retoman con «cierto optimismo».
El secretario provincial de CCOO en Salamanca, Emilio Pérez, manifestó que el objetivo es «salvar el mayor número» de compañeros y abogó porque se lleve a cabo un plan de viabilidad que garantice el «futuro» de los trabajadores, independientemente de los movimientos que lleve a cabo la Dirección. El portavoz sindical también se refirió a la ayuda concedida por el FROB y advirtió de que estará «vigilando» este proceso, «condicionando y presionando innecesariamente» a las partes para «un final que no favorece a los trabajadores».
Desde Csica, su secretario general, Luis José Rodríguez, se mostró «contento» con la respuesta y destacó que los trabajadores son conscientes de que su apoyo es «ahora más que nunca» necesario.