San Andrés pide a Adif unificar en La Sal los talleres del ferrocarril
La segunda reunión de la integración se cierra sin fecha para la llegada del AVE.
La segunda reunión técnica de los ayuntamientos de León y San Andrés con el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para redefinir el proyecto de integración del AVE se cerró como hace un mes: sin una fecha estimada sobre la llegada de la alta velocidad a León, ni sobre la inversión que el Ministerio de Fomento está dispuesto a poner. Compromisos inexistentes, después de que los políticos leoneses decidieran ser los primeros y únicos de toda España en liquidar la sociedad de integración, que ayer tampoco pasaron de escuchar las propuestas lanzadas por los consistorios leoneses. Ideas entre las cuales San Andrés reclamó que se unifiquen en los actuales talleres de material motor, ubicados en el barrio de La Sal, las dependencias de material remolcado para «dar estabilidad al empleo», como explicó la concejala de Urbanismo, Ester Prieto.
El planteamiento de San Andrés permitiría liberar los terrenos en los que está ahora material remolcado: detrás del Centro de Regulación y Control (CRC) del AVE y la terminal de autobuses, donde en la previsión inicial estaría la estación definitiva. «Además se conseguiría un ahorro con tan sólo hacer el traslado de la maquinaria», concedió la edil, quien abundó en que «es importante conservar los más de 100 empleos en espera de ver si se hace el polígono ferroviario de Torneros». «Les hemos dicho que si el soterramiento se va a aplazar a largo plazo, que por lo menos nos digan a cuánto para ver las soluciones provisionales, porque nosotros no renunciamos a soterrar un tren que cose el municipio», subrayó Prieto.
Esta propuesta encaja con la idea que León volvió a plantear a Adif. La necesidad de adecentar los terrenos que han quedado entre la estación y el paso a nivel del Crucero: un terreno en el que se han mantenido las vías y la catenaria, pero que después de dos años de cortar la circulación están sumidos en el abandono. Una necesidad a corto plazo que los representantes estatales prometieron estudiar, al igual que el segundo de los proyectos que San Andrés puso sobre la mesa y que deberá concretar en el próximo encuentro: la conexión entre la glorieta de San Juan de Dios y el consistorio.