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unidos por un mismo destino

Compartir coche o ‘ride-sharing’, es ya una realidad creciente en León. Blablacar, Amovens o Conduzco.es son las web más usadas para conectar personas y reducir gastos de viaje..

César Ochoa y Laia Terrón (con vestido rojo) descargando las maletas de Marta Astorgana a su llegada a León.

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León

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César Ochoa y Laia Terrón son pareja, regresan a Barcelona después de sus vacaciones por el norte de España, pero no volverán solos. Marta Astorgana les acompaña durante el trayecto de Ponferrada a León. Contactaron con ella a través de la red social gratuita Blablacar, dedicada exclusivamente a conectar conductores y pasajeros dispuestos a compartir coche y gastos.

«Nos venía rondando por la cabeza, nos registramos para el tramo Barcelona-Pamplona y en un día se apuntaron cinco personas», declara César.

Asegura que sus motivaciones son principalmente económicas y ecológicas. «Nos hemos ahorrado la mitad de la gasolina y además cambiamos un poco el mundo». Por acercar a Marta desde Ponferrada le han cobrado seis euros. «Es un buen precio, el bus vale nueve euros y el tren, diez», asegura Marta.

Elsa de la Haza es encargada de prensa de Blablacar España: «Nosotros sugerimos un precio máximo que depende de la distancia —usamos el kilometraje fiscal— y de los peajes», explica. La regla de oro es un tercio del precio por pasajero. «Si trasladas a tres personas, el viaje saldría gratis al conductor». Aunque asegura que la filosofía de la empresa es compartir gastos, no realizar actividades económicas. Según los datos que ha aportado la empresa, estimados con tres pasajeros, un conductor que viajase cuatro veces al mes (ida y vuelta), de Ponferrada a León, se ahorraría 15 euros a la semana (780 euros al año). Por el trayecto, de lunes a viernes (ida y vuelta), de Astorga a León, gastaría 35 euros semanales menos (1.820 euros al año).

Otro de los puntos fuertes de compartir coche es conocer gente, así lo asegura Roberto, otro usuario de Blablacar. «Es una manera de relacionarse y hacer entretenido un viaje». Así mismo Laia comenta que el viaje se les hizo más corto e interesante. César asegura que la gente que utiliza este método son personas más abiertas. «Yo no tengo miedo, estoy acostumbrada a este tipo de situaciones», declara la pasajera Marta. Los inconvenientes de compartir coche, que han manifestado cinco usuarios encuestados, son: reducir el equipaje, ser puntual, la posibilidad de sentirse incómodo con la otra persona y la responsabilidad de que pueda suceder un accidente. Elsa explica que el 40% de los usuarios tienen entre 18 y 25 años, pero que los usuarios consolidados y fieles se encuentra entre los 25 y los 40 años. «Lo conocimos por unos amigos, se lo recomendamos a todo el mundo. Vamos a repetir, ha sido una buena experiencia», finalizan César y Laia.

guillermo otero

leonalsol@diariodeleon.es

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