Good Fly sentencia su contrato con León tras cancelar los vuelos a Ibiza y Menorca
El consorcio debe fletar un avión para «rescatar» a 197 pasajeros de estas rutas.
Pese a las advertencias del consorcio del aeropuerto de que no consentiría nuevas cancelaciones de vuelos ni aventuras con horas interminables entre origen y destino, Good Fly volvió ayer a suspender una ruta, con trayecto de ida y vuelta. Una situación que obligó a esta entidad promocional a poner ya en marcha el protocolo de emergencia previsto para dar una solución a los pasajeros de la ruta a Ibiza. Medidas excepcionales, con la contratación de un avión, que hoy también dará servicio a los pasajeros de la ruta a Menorca, igualmente suspendida por la aerolínea.
Según ha podido conocer este periódico, este nuevo incumplimiento, que se suma a los protagonizados con el vuelo a Málaga y Alicante de esta semana, ha provocado que ya se haya convocado para el lunes una reunión de urgencia de la asamblea del consorcio para aprobar la resolución del contrato con esta empresa burgalesa.
Esta entidad explicó ayer mediante un comunicado que Good Fly decidió suspender los vuelos de Ibiza y Menorca sin dar explicación alguna al pasaje. En previsión ya de problemas en la ruta de ayer a la isla pitiusa, el consorcio comenzó la gestión para fletar una aeronave que realizara el vuelo a Ibiza y hoy el previsto a Mahón y vuelta a León, «con el objetivo de evitar así los perjuicios que la compañía ha creado entre los viajeros».
También tiene previsto ya, en caso de que sea preciso si la aerolínea cancelara el vuelo, dar la misma solución a los pasajeros de la ruta de Palma de Mallorca de mañana domingo.
El consorcio cuantifica en 197 el número de pasajeros «atrapados» en las islas del archipiélago balear que podrán retornar con el protocolo de emergencia aprobado el jueves por la asamblea.
El lunes ya están citados los integrantes de este órgano de decisión con dos puntos sobre la mesa: informe del contrato que mantiene con Good Fly y propuesta de actuaciones, con la determinación de zanjar el acuerdo con esta aerolínea tras sus sucesivos incumplimientos.
Precisamente, técnicos del consorcio acudieron ayer a primera hora de la mañana al aeropuerto para levantar acta de la cancelación del vuelo a Ibiza por parte de Good Fly y comprobar que el protocolo de emergencia puesto en marcha funcionaba con el avión fletado para solventar la situación. El avión debía partir a las 9.30 con destino a la isla pitiusa, aunque la salida se retrasó alrededor de noventa minutos.
A pesar de que la aerolínea burgalesa ya había decidido cancelar este vuelo, desde su oficina en León se informó durante toda la jornada de ayer a los pasajeros con billete en esta ruta a Ibiza que el avión saldría en tiempo y forma (en ambas frecuencias), indicando a los usuarios que se personaran en el aeropuerto noventa minutos antes del embarque.
Aunque este periódico trató ayer de conocer la opinión de la empresa sobre la decisión tomada por el consorcio de suspender el contrato ante nuevos incumplimientos y saber si existen o no garantías para que los vuelos continúen hasta el final del acuerdo (mediados de octubre), su gerente, Felipe de Burgos, no atendió en ningún momento las llamadas ni respondió a los correos electrónicos.
Tras la ausencia del jueves en la asamblea el consorcio, los socialistas exigieron ayer a través de un comunicado que Good Fly pague daños y perjuicios por los incumplimientos en sus vuelos de esta semana. Su portavoz en el Ayuntamiento de la capital, José Antonio Díez, propuso la «ejecución inmediata» del aval depositado por la aerolínea burgalesa en el contrato, un 5% del coste total de la adjudicación, que alcanzó los 536.000 euros. «De este modo las instituciones y los leoneses no tendrán que ser los que carguen con el coste de las suspensiones».
Apuntó además que «las condiciones del contrato son clarísimas en cuanto a las posibilidades de sanción de la compañía por los incumplimientos que han sido tan graves que no entendemos cómo no se acordaron ya medidas sancionadoras en la reunión del consorcio de agosto a la que no asistió la presidenta».
Recordó a Isabel Carrasco y alcalde de León que no sólo deben buscarse soluciones «parciales», como la de flotar aviones ahora, aseguró, sino «arbitrar una respuesta definitiva».
Díez también advirtió de que la modificación de las condiciones de pago a Good Fly por parte del consorcio puede ser impugnada por cualquier otra empresa.