Salamanca y Burgos salen en defensa de sus aeropuertos
Si el propósito del Grupo Popular del Ayuntamiento de Valladolid y del alcalde Javier León de la Riva era que se discutiera sobre aeropuertos el éxito ha sido rotundo. Personalidades de Burgos, Salamanca y Valladolino dejaron pasar esta postura que cuestiona de lleno la viabilidad de los aeródromos.
El vicealcalde y portavoz del equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Burgos, Ángel Ibáñez, calificó de «egoísta» la moción vallisoletana y espera que ésta no sea tenida en cuenta. Desde la Diputación burgalesa el portavoz popular Borja Suárez aseguró «no sentirse sorprendido» por las palabras del alcalde Valladolid y calificó de «descabellado» que la Junta las hiciera caso.
En Salamanca, además de la oposición del alcalde Alfonso Fernández Mañueco, el secretario provincial del PSOE, Fernando Pablos, recordó que el de Matacán es el «mejor» aeropuerto en infraestructura de Castilla y León y subrayó la importancia de la escuela de pilotos allí implantada. Algo que también nombró el presidente de los empresarios salmantinos, Juan Martín-Mesonero. «De cara a Aena tenemos 3.000 horas más de vuelos que Villanubla con una escuela de formación número uno en Europa».
El portavoz de los socialistas, Javier Izquierdo, manifestó ayer a Europa press que «si algún aeropuerto tiene potencial y unos mínimos de futuro es el de Valladolid», mientras que el presidente de ese mismo Grupo, Óscar Puente, se mostró sorprendido por la reacción de otras provincias. «Hay que ser realistas no sea que al final los aeropuertos de Castilla y León vayan a ser como la televisión valenciana y nos quedemos sin todos». El alcalde rechazó hacer declaraciones hasta el pleno de hoy.
En las provincias sin aeropuerto los políticos no quisieron meterse en la pelea que no consideran suya como quedó en evidencia en el silencio total en Palencia. Lo curioso fue que, en Segovia, el presidente de la Diputación, el popular Francisco Vázquez, y el alcalde de la ciudad, el socialista Pedro Arahuetes, tradicionalmente enfrentados, coincidieron en su valoración palabra por palabra: «Nuestro aeropuerto natural es Madrid-Barajas».