La calle levanta la voz contra los recortes
Más de 1.500 personas en León y 500 en Ponferrada responden a la convocatoria de la Cumbre Social
La protesta convocada por la Cumbre Social arrancó en la plaza de Guzmán el Bueno.
Bajo el lema Emplea tu fuerza. Vamos a cambiar las cosas, alrededor de 2.000 ciudadanos de la provincia (algo más de 1.500 en la capital y otros 500 en Ponferrada) respondieron ayer a la convocatoria de la Cumbre Social, formada por sindicatos y plataformas sociales, profesionales y culturales. Una protesta instada por la Confederación Europea de Sindicatos y que se celebró en las principales ciudades del país. El mensaje: «Defendamos lo público. Defendamos a las personas. Defendamos las pensiones».
«Es una manifestación para celebrar el bienio negro que llevamos con el PP, y de todas sus reformas contra los intereses y la vida ciudadana», señaló ayer al inicio de la marcha en León Ignacio Fernández, secretario provincial de CC OO. «Básicamente salimos en defensa de las pensiones, lo público y las personas, pero hay otras cuestiones sobre la mesa, como la ley de seguridad y orden público, el anuncio de una nueva reforma laboral y otras que vendrán. Lo que significa que siempre vamos a tener que estar alerta».
La marcha de ayer estuvo salpicada también por trabajadores con amenaza de despidos colectivos, como los de Everest o Alimerka; así como por los mineros y las ya tradicionales pancartas de los partidos de izquierda y el colectivo de mujeres Simone de Beauvoir.
Precisamente a estos colectivos con problemas se refirió Manuel Mayo, secretario provincial de UGT, para quien a León «no llegan ni las migajas de los presupuestos del Gobierno, mientras la Junta no defiende a las empresas locales, ni siquiera a las que están en conflicto. Sólo tenemos más regresión, quieren más esclavos, más jornada laboral, más para los que más tienen a costa de la clase trabajadora».
Por su parte Hipólito Riesco, responsable de CSIF, lamentó que los ciudadanos «hayamos pasado 30 años labrándonos unos derechos y unos servicios públicos de calidad, y en los últimos cinco años sólo hemos peleado para no perderlos. El esfuerzo que debemos hacer los sindicatos es convencer a los ciudadanos del engaño de los políticos, que están poniendo en grave riesgo los servicios públicos logrados con el esfuerzo y el sacrificio de toda una generación de españoles».
La marcha concluyó en la plaza de San Marcelo con los discursos de los sindicalistas.