El 86% de la agrupación local del PSOE respalda la gestión y hace presidente a Giménez
La asamblea ordinaria de la agrupación local del PSOE se celebró ayer.
Sin rastro de los 86 críticos que exigían un cambio de rumbo hace apenas dos meses, la agrupación local del PSOE pasó ayer la reválida de su asamblea ordinaria con un respaldo del 85% de la gestión. Un apoyo ante el que tan sólo aparecieron 15 abstenciones y en cuyo censo no se contabilizaron los treinta integrantes de la ejecutiva dirigida por José Antonio Diez, quienes no ejercieron el voto.
Una posición de fuerza con la que el secretario general de la agrupación avaló los cambios internos en la ejecutiva. Unas variaciones que pasan por el encumbramiento de José Giménez como presidente, cargo que hasta ahora no existía, y que por derivación da la vicesecretaría general a Raúl Alfageme. El núcleo de poder, completado con Susana Travesí y Vicente Canuria, alrededor del cual se conformaron otros movimientos para acomodar áreas: Alejandro Rubial se hace con sostenibilidad, además de formación; Pilar Herrero se encargará de sanidad; y Evelia Fernández suma educación a cultura y patrimonio.
El único cambio que generó polémica fue la creación de la nueva secretaría de juventud dentro de la ejecutiva. Un puesto que ocupará Nuria Rubio y ante el que expresó su queja el secretario general de Juventudes Socialistas, Héctor Carrera. El choque en el que queda de manifiesto que el líder juvenil afín a la dirección provincial de Tino Rodríguez ve como un contrapoder la creación de un área paralela, controlada por la agrupación local, para conseguir de facto aglutinar el movimiento de la juventud del partido desde la agrupación local.
Pese a esta intervención, el resto de la asamblea estuvo protagonizada por el discurso de defensa de la gestión realizada en el último año por José Antonio Diez, quien defendió la importancia de trabajar en la recuperación de las bases de la formación, que en la actualidad cuenta con 632 afiliados; lejos de los 821 que había en el 2008, con la anterior dirección de Miguel Ángel Fernández Cardo, que perdió durante su mandato 229 afiliaciones de socialistas.