La escasez de personal y la acumulación de fiestas satura las urgencias

La urgencias sanitarias de León tanto en Atención Primaria como en el Hospital están saturadas. A esta situación contribuyen la escasez de personal sanitario, que no se sustituye en vacaciones, y la acumulación de festivos con el recorte de la actividad programada en una época del año en la que, además, aumentan los procesos catarrales y comienzan los primeros casos de gripe. En Atención Primaria están de vacaciones disfrutando de días ‘moscosos’ el 35% de la plantilla, el máximo que permite la dirección médica. Además, el final de año ha coincidido con un aumento de ausencias laborales del profesional médico con nueve bajas maternales y cinco jubilaciones recientes que no se han sustituido todavía, según explica el director médico de Atención Primaria de León, José Luis Palomo, que califica de «excepcional» la situación provocada este año.

«Es imposible trabajar así, estamos a tope», se lamentaba ayer por la mañana un médico del ambulatorio La Condesa, centro que en estas fiestas navideñas se ha quedado con un solo pediatra de los tres que trabajan habitualmente, uno por jubilación y otro ausente por enfermedad.

La falta de personal obliga a los responsables de las agendas a citar a los pacientes para dentro de diez días, lo que provoca la queja de los usuarios cada día en las ventanillas de los ambulatorios. «He pedido hora para el pediatra y me han dicho que no me pueden atender hasta el 8 de enero y que si es algo importante lleve al niño a urgencias de José Aguado». El centro de salud José Aguado se quedó un día de la semana pasada con un solo médico que atendió a más de 140 pacientes, según fuentes sindicales.

Ayer, junto al 23 y 26 de diciembre, son, de momento, los días con más colapso en los servicios de urgencias, pero los profesionales médicos y enfermería se preparan para jornadas de saturación durante el fin de semana.

«De espanto», se lamentaba un médico de Eras de Renueva. «Si mis compañeros se van de vacaciones tengo que asumir su cupo y cuando yo me voy ellos asumen a mis pacientes. No son vacaciones reales. Todo porque no quieren contratar a nadie para las sustituciones y luego presentar sus números de ahorro. Pero la calidad de la asistencia no cuenta en los números».

El responsable de Sanidad de UGT, Faustino Sánchez, asegura que la situación de «colapso» que viven los centros de salud en estas fechas se debe a que Sacyl no contrata a personal para sustituir a los médicos y enfermeras que están de vacaciones o de baja. «Hay una bolsa de empleo de profesionales y no se les llama», asegura Sánchez, que pone la atención sobre la saturación laboral de médicos y enfermeras que pasan consulta estos días «¿en qué condiciones pueden estar haciendo su labor profesional?», se pregunta.

UGT denuncia que la noche del domingo 29 al lunes 30 se colapsaron las urgencias de Eras de Renueva, «un solo médico y un residente atendieron esa noche a 200 personas, eso no es normal y me consta la preocupación de los profesionales sobre la calidad de la asistencia». Habitualmente las urgencias de este centro de salud están atendidas por tres médicos y un residente.

Biombos en la sala de espera

Las urgencias hospitalarias vivieron ayer otro día crítico con una «avalancha» de pacientes, como la define uno de los especialistas del servicio, que ayer se vio de nuevo desbordado con colas de pacientes a la espera de atención. Por la mañana, la sala de espera y el triaje llegaron a acumular a más de cien personas esperando ser atendidas, sin contar con los pacientes que ocupaban camas en los boxes. Fuentes sanitarias aseguran que enfermos con una orden de ingreso desde las diez de la mañana aguardan hasta las cinco de la tarde para ocupar una cama en planta, lo que obligó ayer por la noche a los responsables del servicio a derivar a pacientes para su ingreso en San Juan de Dios o la clínica Altollano. «A esta situación se llega porque los pacientes vienen con distintas enfermedades que hay que vigilar y hacer pruebas complementarias, además de que a los residentes de urgencias les han quitado días de guardia, por lo que los fines de semana y los festivos estamos con la mitad de los siete residentes que hay habitualmente, así reducen sueldos».

Una de las pacientes que ayer permanecía en urgencias del Hospital a la espera de su ingreso se lamantaba de la situación. «Esta tarde —por ayer— han puesto biombos en la sala de espera para colocar pacientes en silla de ruedas y en la sala que hay al lado del triaje las camillas se amontonaban y se cortaban el paso entre ellas».