La deuda con Valladolid por la psiquiatría lleva veinte años coleando
La deuda que las arcas provinciales mantienen con la Junta a cuenta de la asistencia psiquiátrica en Santa Isabel, antes propiedad de la Diputación, se remonta a los años noventa del pasado siglo.
Una sentencia contraria al Palacio de los Guzmanes que data de aquella época, cuando gobernaba el socialista Agustín Turiel, y que obligaba a pagar por el mantenimiento de Santa Isabel 8,4 millones de euros (alrededor de 1.400 millones de pesetas de aquel momento). Actualmente, esta deuda se ha acortado hasta los 5,4 millones.
Con Isabel Carrasco como consejera de Economía y Hacienda acordó con la Diputación que esta deuda fuera pagada a plazos para que la institución provincial pudiera saldarla cuanto antes. En aquel entonces presidía José Antonio Díez.
El siguiente equipo de gobierno, capitaneado por Javier García-Prieto, dejó de pagar y la Junta planteó un contencioso, que León perdió. Y con la llegada de Carrasco, a pesar de los intentos por solucionar el asunto, no pudo evitar que el contencioso siguiera su curso.
En la negociación con la Junta exigió que incluyera la venta del San Antonio Abad, un edificio cuyos gastos de mantenimiento, impuestos y tasas sigue pagando la Diputación a pesar de estar ocupado por Sanidad.
La primera tasación fijó el valor de este inmueble en diez millones de euros, aunque ahora se revisa por parte de Hacienda y quedará en algo más de siete. En la primera se habían incluido una serie de parcelas que equipos de gobierno anteriores ya vendieron a la Junta, por lo que hubo que reajustar centrando el precio en el suelo aún en manos de Diputación y el edificio.