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Los 26 leoneses en Afganistán alcanzan las 5.000 horas de vuelo del avión espía

El contingente de El Ferral estará en Herat al menos hasta el próximo mes de abril.

León

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Siete pilotos (uno de los cuales es una mujer) procedentes del Regimiento de Artillería de Campaña 63 con base en El Ferral del Bernesga, y otros 19 efectivos más dedicados a diferentes tareas alcanzaron las 5.000 horas de vuelo en la base de Herat, después de 826 misiones de reconocimiento y vigilancia, según confirmaron ayer a este periódico fuentes del Estado Mayor de la Defensa.

El contingente leonés, que partió hacia Afganistán el pasado mes de octubre, tiene previsto permanecer en la base de apoyo avanzado de Camp Arena al menos hasta el próximo mes de abril: «Después de cumplir los seis meses que nos tocaban, no sabemos si habrá que renovar otros seis meses más estarán de vuelta», significaron fuentes militares a este periódico. Hasta ahora, el Regimiento de Inteligencia número 1 con sede en Valencia y el RACA 63 de El Ferral con sede en la base Conde de Gazola, alternaban sus tareas.

La Unidad de Aviones no Tripulados re Reconocimiento (UAV-PASI según sus siglas en inglés) está desplegada en Herat desde el año 2008, y tiene como misión el manejo de aeronaves no tripuladas UAV Clase II, tipo Searcher, en apoyo a la misión ISAF de OTAN.

Escoltas

Los UAV españoles (Vehículo Aéreo no Tripulado, en sus siglas en inglés) desempeñan misiones de ISR (Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento). Desde su llegada a Herat, la Unidad PASI ha proporcionado escolta a convoyes, así como seguridad a las bases donde se encuentran ubicadas las tropas españolas y a las operaciones terrestres en las que participan las mismas, bajo el mando directo del coronel del Ejército del Aire Jefe de la Base Aérea de Herat.

Asimismo, la Unidad PASI tiene una dependencia táctica del Mando Regional Oeste de ISAF, cuyo Cuartel General está situado en el interior de la propia base española, llevando a cabo misiones específicas a petición del mismo, en consonancia con los cometidos ya descritos.

También Valencia

El personal de la Unidad PASI, se nutre alternativamente de las Unidades de Valencia y de León. Actualmente todo el personal desplegado de UPASI XIII procede de la base del Conde Gazola.

El Ministerio de Defensa se gastó en su día ocho millones de euros en el proyecto, para poder fabricar tres vehículos aéreos no tripulados capaces de realiuzar misiones de vigilancia y observación de forma automática.

El programa de ensayos se centró en aplicaciones exclusivamente operativas en las que los militares comprobaron desde tierra sus maniobras pero a vista de pájaro.

Hay multitud de aplicaciones para el ámbito civil, pero lagunas de corte legal impiden que se apliquen en la práctica. Podrían servir por ejemplo para ejercer labores de vigilancia en los bosques y convertirse en un arma de vanguardia de cara a los incendios forestales. Pero ningún país en el mundo ha conseguido resolver ese problema en la actualidad y el asunto sigue en el mismo punto.

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