Cerrar

«Nunca tuve problemas en enseñar mi cicatriz, aunque me veía extraña»

Cristina Pantoja luce tatuado el lazo rosa.

Publicado por
c. tapia | león
León

Creado:

Actualizado:

Cristina Pantoja espera los resultados de una prueba genética para entrar por tercera vez en el quirófano y terminar su reconstrucción de pecho. Tiene 40 años y durante ocho se sometió a tratamientos hormonales de fertilidad. Ahora tiene dos niños de cuatro años. «Me han dicho que mi tumor es hormonal». La detección de un cáncer de mama a su madre le salvó la vida a ella. «Me dijeron que tenía que hacerme una prueba. Había notado bultos en mi pecho pero jamás creí que pudieran ser tumores». El 20 de abril de 2012 le quitaron el pecho y el 10 de diciembre «me sometieron a la primera operación para la reconstrucción». Su diagnóstico no precisaba ni quimioterapia ni radioterapia, por eso la operación no se hizo esperar. En el resto de las pacientes los cirujanos aguardan a que la enfermedad esté en remisión completa, sin recaídas, antes de reconstruir la mama. «Aunque no esté reconstruido del todo lo veo como un pecho normal. Utilizaron la técnica de dorsal ancho, con un músculo de mi espalda. En la segunda operación me cogieron grasa del abdomen para el relleno y ahora espero los resultados de las pruebas porque no saben si tendrán que quitarme el otro pecho». La reconstrucción ha supuesto para ella «un regalo mejor que unos zapatos Manolo Blahnik, que son mi pasión», bromea. Confiesa que «nunca tuve problemas en enseñar mi cicatriz, aunque cuando me miraba al espejo me veía extraña». Ahora está feliz. Lleva tatuado en la mano el lazo rosa de la lucha contra el cáncer de mama. «Entrar en Almom es lo mejor que me ha pasado en 2012. Somos un grupo de jóvenes que nos lo pasamos bien».

Cargando contenidos...