La familia cree que durante la investigación se dieron demasiadas irregularidades
La familia sostiene la existencia de irregularidades en el transcurso de la investigación que imposibilitaron el esclarecimiento del caso. Así, entiende que dos individuos rumanos detenidos en relación con otro delito y que manifestaron inicialmente conocer detalles muy importantes respecto a este homicidio, fueron arrestados y puestos en libertad sin pasar por sede judicial siquiera.
«Sabían muy bien de lo que hablaban y dieron demasiados detalles, pero no les quisieron hacer caso», se quejó Baldomero Fernández, el padre de la joven fallecida.
«Si acertar a la lotería fuera igual de fácil que saber quién mató a mi hija, yo ya era millonario», explica Baldomero cuando se le preguntan por sus hipótesis en torno a la autoría del crimen. Las pruebas que se realizaron al cadáver determinaron que Rocío, de 24 años de edad en el momento de su fallecimiento, estaba embarazada. Y en su seno interno, los progenitores de la finada consideran que el motivo de su muerte está estrechamente ligado a esta circunstancia.
Durante todo este tiempo, la familia Fernández Ameijeiras convocó en varias oportunidades concentraciones de repulsa, para exigir justicia con el caso de su hija y a la vez protestar por el curso que se le estaba dando a nivel judicial al asunto, en los diferentes órganos por los que ha ido pasando el caso a lo largo de todo este tiempo, que serán ocho años en mayo.