Fomento mantiene los recortes del tren en León con 300 millones de beneficios en caja

Después de reconocer que algunos territorios de España tienen «de todo y otros nada», la ministra de Fomento, Ana Pastor, mostró orgullosa las cifras de una gestión que, desde que ella se puso al frente de la cartera, ha generado un beneficio neto de 300 millones de euros en el Grupo Fomento. Mientras, su departamento se enroca e insiste en que los proyectos ferroviarios de León deben ser recortados con la excusa de ajustar gastos y la necesidad de marcar prioridades en el calendario de inversiones.

De momento, el AVE a León llegará en 2015 en una sola vía. Como argumento, la intención de acelerar la llegada de la alta velocidad y no sumar más retrasos a la espera de una mayor consignación presupuestaria que permitiría la doble vía. Y llegará a la estación fondo de saco que nació como provisional y lleva camino de convertirse en definitiva. Precisamente, esta infraestructura fue motivo de crítica por parte de la ministra en su visita a Valladolid después de afirmar que es necesario invertir «con cabeza».

La capital espera desde hace décadas la integración del tren para evitar el estrangulamiento que las vías ejercen sobre el oeste de la ciudad. Esta inversión precisa 600 millones de euros, incluido el desarrollo del polígono industrial de Torneros. La ministra ya advirtió el martes de que este plan sólo será posible si León logra financiación, a través de la venta de los terrenos ligados al tren para afrontar este ingente proyecto. «Se acabaron los protocolos que son papel mojado y sólo valen para hacerse la foto», remarcó Pastor. El plan de integración de León nació precisamente de la firma de un convenio con el ministro de Fomento de aquel momento (noviembre de 2002), Francisco Álvarez Cascos, que fijaba la constitución de la sociedad León Alta Velocidad, ahora disuelta. Supone un caso único, ya que en el resto de ciudades que adoptaron esta fórmula para la integración sigue en funcionamiento.

Feve también espera una solución al recortado proyecto en el que ha quedado el plan global proyectado para León y su vía estrecha. Llegaron a estar adjudicados 33 millones, aunque ahora se han reducido a once con obras que han dejado mermado al mínimo la integración y las potencialidades de transporte que se habían fijado para este tren.

Mientras, la ministra se congratula de los 6.500 millones de euros que ha licitado el Ministerio en los últimos años, después de encontrarse a su llegada una deuda de 40.000 millones y 4.000 facturas sin pagar, entre ellas, expropiaciones de terrenos valoradas en 600 millones. El Grupo Fomento ha pasado de tener unas pérdidas de 694 millones de euros a conseguir un beneficio de neto de 300.