La plataforma social desafía al PP a que presione al Gobierno con el ferrocarril

Con el respaldo de los 15.000 manifestantes sacados a la calle y la fuerza de la unión de 46 colectivos sociales, empresariales, profesionales, políticos y sindicales, la plataforma contra los recortes del ferrocarril reclamó ayer al PP de León que «es el momento de que dejen de deshojar la margarita y reconozcan el asunto, que la población les llama para que estén de este lado». El reto lanzado para que «abran vías de conexión para ir todos juntos al Gobierno», como expuso el portavoz del movimiento, Ignacio Fernández, tras recordar que al manifiesto se han adherido «los procuradores en las Cortes autonómicas de UPL y PSOE, así como de los miembros socialistas del Congreso y el Senado y los diputados provinciales». Todos «menos los del PP», apostilló el secretario provincial de CC OO, quien apuntó que querrían que «a estas adhesiones se sumaran los diputados y procuradores del PP, que han estado haciendo durante todos estos días equilibrios dialécticos para dar la impresión de que sí, pero que no, y quién sabe».

La plataforma se agarra a «los cuatro puntos del manifiesto» y no le va a «despistar el hecho de que se insista en que el AVE va a llegar el año que viene», como ha repetido el PP durante estas dos últimas semanas para aplacar las críticas hacia el Ministerio de Fomento. Los planteamientos del frente común «no son sólo el AVE el año que viene, sino que llegue, en condiciones, con doble vía y sin merma en la seguridad», en contra del proyecto aprobado por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para que el trazado desde Valladolid quede, por ahora, reducido a tan sólo una vía. «No tenemos prisa porque llegue antes de las elecciones municipales», apostilló Fernández, quien incidió además en que la reinvindicación busca además «la coexistencia de la alta velocidad con el transporte ferroviario convencional».

El portavoz del movimiento social abundó en que se mantiene la «reivindicación de la necesidad del mantenimiento de la centralidad de las dos estaciones ferroviarias», tanto de Renfe, donde ahora se plantea la vuelta a la antigua terminal, como de Feve, en la que el Adif se plantea poner el final de línea en La Asunción, lo que dejaría el tren a casi dos kilómetros del centro. Una petición que se fija como irrenunciable junto a «la adecuada integración de las líneas en el entorno urbano y periurbano», así como con «la garantía del empleo en el sector», mediante «el desarrollo del polígono ferroviario y logístico de Torneros y la puesta en funcionamiento del Centro de Regulación y Control (CRC) de las líneas del norte y el noroeste de España»

Estas reivindicaciones, «compartidas por la mayoría social de la población», se presentarán en las reuniones solicitadas «de manera inmediata» a «los alcaldes de León y San Andrés del Rabanedo», quienes «tienen mucho que decir, mucho que contarnos y mucho que exigirles», apuntó el responsable del sector ferroviario de UGT, José Manuel Vidal, quien adelantó que también se pedirán encuentros con «la Subdelegación del Gobierno y con la presidenta de la Diputación». Los apoyos con los que se quiere llegar hasta el presidente de la Junta e, incluso, el Ministerio de Fomento y el Gobierno central.