«Tenemos que llegar a acuerdos que flexibilicen la contratación y el despido»

—¿Hay que abandonar ya el pesimi smo?

—En el CEL transmitimos optimismo. Si el empresariado leonés no cree en sus iniciativas es imposible que nuestra provincia salga adelante.

—¿Echa usted de menos algún plan concreto del Gobierno?

—Hay una disociación entre los parámetros económicos y el parámetro clave del desempleo. Hay que establecer una política clara de creación de empleo al margen de la económica. La reforma laboral tiene que seguir otras fases para que de sus frutos.

—¿Cómo debería ser la segunda fase de la reforma laboral?

—Las medidas que ha tomado el gobierno no han creado empleo. Si queremos que el acuerdo sea estable y serio hay que consensuarlo entre la administración pública, los sindicatos y las organizaciones empresariales. Creo que hay que simplificar mucho toda la pluralidad de contratos. Hacerla sencilla y flexible.

—¿Qué quiere decir con flexible?

—Acuerdos que faciliten al máximo la contratación y el despido. Todo el acto de contratación y despidos tiene que ser más natural.

—¿Está de acuerdo con la propuesta del presidente de la CEOE de extender al contrato indefinido ordinario el periodo de prueba de un año sin indemnización en caso de que el trabajador no lo supere?

—Es perfecto. Es lo que necesita el país, creación de empleo. El empresario tiene que perder el miedo a invertir en un proyecto empresarial y a contratar empleados. Esta situación dramática exige mucha responsabilidad por todos los actores sociales. Si la parte social y sindical tiene que ceder en determinados puntos lo debe de hacer.

—Bruselas exige más ajustes a España para evitar incumplir el objetivo de déficit en 2015. El programa de estabilidad del Gobierno hasta el 2017 mantiene los recortes en el gasto público. ¿Está de acuerdo?.

—Tiene que haber sentido común y uno sólo puede gastar lo que tiene.

—¿No está de acuerdo con los que opinan que para salir de la crisis hace falta todo lo contrario?

—Es de sentido común. Uno tiene que endeudarse lo que la lógica y su capacidad le permita.

—En la reforma fiscal que prepara el Gobierno se establece la rebaja del tipo de interés del tramo del IRPF y un tipo de reducido para autónomos con escasa renta

—Soy partidario de que el Estado intervenga lo menos posible. Cuanto menos nos frían a impuestos mejor porque ese dinero estará en la calle. Confío mucho más en el sentido común de las personas y en las empresas, de cómo invierten ese dinero, que en el sentido común del Estado en cómo invierte ese dinero. Se van a bajar todos los tipos de imposición directa y, por lo que tengo entendido, se aumenta la imposición al consumo. El incremento sobre el consumo debería bajarse en los productos de primera necesidad. En cuento a la medida que afecta a los autónomos me parece muy buena. Es perfecta para los que sufren para mantener el negocio.

—Suiza ha votado el salario mínimo y ha rechazado fijar el mínimo legal en 3.270 euros. En España el salario mínimo es de 752 euros, ¿habría que modificarlo?

—Hay que abogar porque las personas vivan bien. Bastante desgracia es que tengamos que trabajar para que las condiciones salariales no cumplan el mínimo de dignidad. No soy partidario de bajar los salarios. Soy partidario de que trabajemos más horas y seamos más eficientes.

—Patronal y sindicatos se sientan ahora a negociar la renovación del pacto salarial. Tras años de recortes ¿es el momento de subir los sueldos?

—Subiría los salarios en proporción a la calidad del trabajo y la dedicación. Hay que trabajar más horas y mejor.

—¿Cuál es el sector económico que va a tirar de la economía de León?

—El sector del contact cente r y la tecnología están tirando de la economía leonesa y da empleo directo a más de 5.000 personas, aunque estos dos sectores no nos van a sacar de la crisis porque no es un gran generador de empleo. Hay base tecnológica para desarrollarla en toda la provincia.

—¿Qué va a sacar a León de la crisis?

— León debe mirar con cariño otra vez el mundo rural. Hay que invertir en infraestructuras. Si León vuelve a su origen tendrá futuro, aplicando las nuevas tecnologías y buenas prácticas.

—En su junta directiva sólo hay una mujer, Manuela González, de Graveras Las Omañas. ¿hay pocas más mujeres empresarias en León?

—Las mujeres tienen que estar más representadas en los puestos directivos. La realidad es que hay más empresarios hombres. Cuando hicimos la candidatura nos pusimos a buscar y encontramos a una que levantó la mano y de hecho es una de los 24 miembros más activos.

—El INE empezará a computar como Producto Interior Bruto la prostitución y el tráfico de drogas. ¿Qué le parece?

—Me alucina pero si lo piensas tiene su sentido. No tenemos que cerrar los ojos a esa realidad. Si es un sector más de actividad probablemente tenga sentido que se incluya porque mueve dinero como cualquier otro. El negocio de la droga me causa estupor.

—Usted se puso como reto la externalización del CEL. ¿Qué pasos se están dando?

—La sede de Madrid tiene una media de cuatro reuniones diarias. Abriremos antes de agosto sedes en Valladolid y Barcelona y en eptiembre, aunque ya están habilitadas, las de Lima y Bogotá, porque entendemos que Latinoamérica es un mercado natural para el empresariado.