Nueva época para el sector: del empeño de oro al empeño de coche

Donde antes acudían al empeño del oro, ahora se extienden contratos de compra venta de vehículos que se ejecutarán como garantía última de que no se salve el empeño del coche. Se empeñan coches igual que terminales de terminales de smartphones.

Las soluciones límite para salvar apuros financieros han mutado en género, también, Los establecimientos de compro oro se han agotado al tiempo que emergió otro sector; también de empeños, que exponen como garantías pertenencias con valor comercial y de uso habitual y generalizado. El desplome del unos resulta directamente proporcional a los brotes de los otros. «Nosotros pagábamos el gramo de oro hace sólo unos meses a veinticinco euros y ahora no podemos llegar a dieciocho, porque el mercado ya no demanda y tampoco la oferta es mayoritaria», explica sobre el cambio de tendencia Alejandro Álvarez, en un establecimiento del sector situados en la Avenida de Roma ,de la capital leonesa. Detrás de las mamparas de seguridad se amontonan hoy ordenadores portátiles, teléfonos móviles de última generación, y escritos de compraventa de coches compatibles en las ventanillas de la Jefatura Provincial de Tráfico. El coche está hoy al frente del escalafón cuantitativo que mide los empeños. «Solemos valorarlo por un tercio de su valor», explican los prestamistas a los que las nuevas dimensiones del negocio les disiparon aquella condena hacia el cierre que hizo prever una reconversión salvaje del sector. En la ciudad quedan apenas una decena de establecimientos de compra venta de oro frente al casi medio centenar que hubo en la época dorada que sobrevino a la crisis.