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Los 6,5 millones recaudados ya por el IBI alivian gastos y el pago de nóminas
Quedan pendientes de cobro 2.908 recibos por importe global de 722.859 euros.
El cobro del IBI permitirá abonar las nóminas y gastos de gestión del Ayuntamiento.
Las arcas municipales de San Andrés del Rabanedo han recibido un importante espaldarazo, gracias a la recaudación efectiva de 6,5 millones de euros correspondientes al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Según los datos facilitados por la Concejalía de Hacienda, el 90% de los contribuyentes del municipio abonaron en el plazo estipulado (hasta el pasado día 7) las cuantías de 2014, que oscilaron entre los 200 y los 500 euros según las características de las viviendas.
El Ayuntamiento giró 28.935 recibos del IBI esta campaña, que permitirían ingresar 7.297.500 euros. De ellos, han quedado pendientes de cobro 2.908 recibos por importes que suman 722.859 euros. La cantidad de impagos es similar a la registrada el año pasado, en que la falta de ingresos alcanzó los 727.000 euros.
El Consistorio ha ampliado las compensaciones y el fraccionamiento del pago para dar facilidades a los vecinos en un momento económicamente delicado. De hecho, el IBI aporta una buena radiografía de la salud de las economías familiares, ya que los impagos del impuesto se han triplicado en el último lustro. En 2008, el Ayuntamiento dejó de ingresar por ese concepto 175.000 euros. Un agujero que ha ido paulatinamente aumentando y que en 2012 ya representaba 529.000 euros.
El IBI representa el principal ingreso para San Andrés, que empleará los 6,5 millones ya recaudados al pago de las nóminas de los trabajadores municipales, las extras y diversos gastos de gestión municipal durante los próximos seis meses. De los nueve millones de ingresos, el Impuesto de Bienes Inmuebles aporta casi siete y los otros dos tasas, licencias de apertura e IAE.
La acumulación de recibos sin pagar de tasas e impuestos municipales impidieron el año pasado al Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo ingresar la cantidad de 1.490.652 euros. La cifra de impagos se ha doblado en tres años. El IBI es el tributo municipal que más han dejado de costear los ciudadanos, y supone casi el 50% del montante global que figura como adeudo de los contribuyentes. También las plusvalías, que quedaron sin liquidar en 172.398 euros, o la tasa de vehículos, cuyos propietarios dejaron sin satisfacer 168.434 euros a la Hacienda local. Respecto al Impuesto de Actividades Económicas que deben abonar los empresarios, quedaron sin saldar 139. 975 euros. La Oficina Municipal del Recaudación practicó el año pasado 12.859 notificaciones para el cobro de aquellos tributos no domiciliados y recaudó 11,3 millones, el 83% en periodo voluntario.